Johan Huibers, un empresario neerlandés, comenzó a construir una réplica del Arca de Noé desde el año 2012, basando sus planos en las descripciones de la Biblia. De acuerdo con una entrevista con la Jewish Telegraphic Agency, el hombre planea realizar navegar a bordo del arca por las aguas de Israel. "Mi destino preferido para el arca es Israel", aseguró Huibers,pues su amor por el país hebreo fue lo que lo motivó para llevar a cabo este proyecto.

Para poder construir la embarcación, recaudó alrededor de 5 millones de dólares. "No obedecen, hacen lo que quieren, conducen como locos, empujan mientras esperan en la cola y no escuchan a nadie. Igual que yo", dijo el Johan acerca del comportamiento del pueblo israelí.

Según declaraciones del empresario solo tiene sentido llevar el barco a tierras de Dios, pues "se trata de una copia del barco de Dios" y "solo tiene sentido llevarlo a la tierra de Dios". También añadió que necesita alrededor de 1,3 millones de dólares más para que la embarcación logre navegar por aguas judías, pues aún no tiene motor. El hombre recibió la “iluminación” de construir este increíble proyecto de 118 metros de largo, 22 de alto y 10 de grosor, gracias a que fue inspirado en una ocasión en que leía a sus hijos sobre ese mismo pasaje de la biblia. Actualmente, el arca se encuentra en la localidad de Krimpen aan den Ijssel, Países Bajos, a las orillas del río Mosa, donde miles de turistas llegan a contemplar la majestuosidad del barco, que se ha convertido en un atractivo turístico. Con este trabajo, su creador busca "mostrarle a la gente que Dios existe" y advertirles de que "estamos viviendo en el fin de los tiempos […] debido al calentamiento global, el aumento del nivel del mar, los incendios", aseguró. Finalmente agregó que el objetivo de este arca no es proteger a su familia o a sí mismo, sino lograr que la gente se prepare en caso de un peligro real y reflexionen al respecto. --

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