Raúl Gutiérrez es uno de los técnicos más infravalorados del futbol mexicano. En su historial cuenta con un campeonato y un subcampeonato del mundo con la Selección Mexicana en la categoría Sub 17. A pesar de sus éxitos en el banquillo, pasó por un largo tiempo desempleado, que le llevó a buscar nuevos horizontes y en este 2021, cuando se cumplirá una década de haber levantado la Copa en el Estadio Azteca, se hará cargo del Real España de Honduras. Gutiérrez estuvo al frente del Tricolor juvenil que se coronó en México 2011. Dos años más tarde logró el subcampeonato en el torneo que se realizó en Emiratos Árabes Unidos. En los Juegos Centroamericanos de 2014 logró la medalla de oro y en los Panamericanos de 2015 su equipo consiguió plata. Pero las oportunidades en el futbol local fueron limitadas. Esa situación tiene que ver con las decisiones de los dueños y los presidentes de los equipos. Una de las problemáticas con las que me he enfrentado desde que salí de las Selecciones Nacionales es que te tachan de entrenador de selecciones jóvenes y eso complica que te contraten. Pudiera decirse que es injusto, pero así son las reglas. En México hay entrenadores muy capaces, yo soy uno de ellos, pero el problema es que si lo digo yo, entonces soy un engreído o un agrandado porque cómo voy a decir que soy el máximo ganador de partidos oficiales de la FIFA que tiene México, entonces soy un desubicado, pero nadie lo dice”, expuso Gutiérrez entrevista con Excélsior. El que fuera campeón con el Atlante en 1993, dirigido por Ricardo La Volpe, aseguró que no se le ha dado el valor adecuado a su carrera en los banquillos. Por eso decidió emprender la aventura en el futbol hondureño. EXCÉLSIOR