CIUDAD DE MÉXICO.- Hablemos de una realidad. Hoy casi todos los días se le recuerda a los millennials que deben ahorrar para su futuro, cada septiembre sabemos que es el “mes del testamento” y, de vez en cuando, en algún momento de crisis, como un sismo, reconocemos la importancia de asegurar nuestros bienes. Pero, ¿qué pasa si no tienes a quién dejarle tu capital? Puede ser, por múltiples razones, que no tengas familia, hijos o alguien a quien quieras dejarle tu patrimonio, el dinero de tu cuenta de banco, o lo que se vaya a cobrar por tu seguro de vida o de retiro; en este caso, tal vez te preguntes ¿qué sentido tiene?, y por ello decidas vivir el presente y gastar a todo lo que da. La verdad es que es conveniente que de todas formas tengas bien definidos a tus beneficiarios al momento de contratar cualquier servicio financiero, incluyendo el trámite testamentario. Pero en caso de que no tengas familia o herederos “naturales”, puedes elegir entre varias opciones. A continuación te presentamos algunas de acuerdo con expertos de Compara Gurú. Un familiar en segundo o más grados En realidad, no hay una restricción en a quién le dejas tu dinero, incluso, si no están relacionados contigo por sangre, matrimonio o concubinato. Un menor de edad En este caso, puedes abrir un fideicomiso, o bien, designar un tutor que entregue al menor de edad (mientras lo sea) la cantidad que hayas destinado para él. A dos o más beneficiarios Puede ser que tengas en mente a más de una persona a la que le tengas la confianza suficiente para ser tu beneficiario, en este caso, sólo debes tener cuidado en que los porcentajes sumen 100%. A una institución Sí, también puedes donar tu patrimonio una vez que no estés a la organización que prefieras, en este caso, sólo deberás mencionarla tal cual es su nombre legal. ¿Qué hacer para dejar como beneficiario a alguien que no sea de tu familia? Los datos deben coincidir con su identificación pues, de lo contrario, no podrán cobrar el monto. Especifica el porcentaje que decides dejar, si es a una sola persona, deberás dejar claro que dejas el 100%. ¿Por qué debes dejar un beneficiario? Una vez que no estás, el dinero queda en custodia de la institución financiera hasta que aparece quien tenga derechos de reclamarlo iniciando un proceso legal, si logra demostrar una relación directa contigo, podrá tener acceso a los recursos, aunque el banco podrá quedarse una comisión de hasta el 20%. En caso de que nadie aparezca, los recursos pasarán a ser propiedad de la institución. Por eso mismo, piensa bien a quién le dejarás el fruto de tu trabajo. -- EXCÉLSIOR