Año con año desde que llegó al trono, la Reina Isabel da un mensaje de unidad a su nación con el pretexto de las fiestas. Si bien son sus palabras las que buscan transmitir lo que cada año considera necesita su pueblo, hay otros detalles que también tienen un gran significado detrás y es que como suele suceder en la realeza, nada se deja al azar. Este año, el White Room del Castillo de Windsor se vistió de gala para grabar este mensaje y como siempre, fueron los retratos que adornaron el lugar los que hicieron un breve resumen del año para la Familia Real. Siempre pendiente de los detalles, la Reina suele usar estos discretos detalles que para muchos podrían pasar desapercibidos, como una forma de hacer homenaje a los momentos más importantes del año. Cada una de sus oficinas en sus diferentes residencias, cuentan con este tipo de sutiles mensajes que suelen contar su propia historia. Durante su mensaje, la Reina dejó claro que éste ha sido un año diferente para los suyos: “Ha sido un año ocupado para mi familia con dos bodas, dos bebés, otro bebé que se espera pronto. Eso ayuda a tener a una abuela muy ocupada”. ¿Repasamos los retratos que presumió en el que sin duda ha sido uno de los años más agitados para la Familia Real? La primera imagen junto a la Reina fue un sentido homenaje a su primogénito, el Príncipe Carlos que se encuentra celebrando su cumpleaños 70. De forma muy tierna, la Reina se decidió a usar una imagen tomada en 1949 cuando el bebé tenía seis meses, en la que el Príncipe Felipe y la entonces Princesa Isabel posaban con su primer hijo y heredero al trono. En su papel más cálido de mamá, la Reina jugaba con un pequeño Carlos que tomaba su collar de perlas. La imagen es parte de esta secuencia, en la que en esta imagen aparecen únicamente mamá e hijo. Siguiendo con este tema, la próxima foto fue la que el Príncipe se tomó acompañado por su esposa, la Duquesa de Cornwall, sus hijos, Harry y William, sus nueras, Kate y Meghan, y sus encantadores nietos, George, Charlotte y Louis. Esta imagen fue tomada en septiembre pasado en Clarence House conmemorando el cumpleaños del Príncipe de Gales. Se dice que en esta imagen no apareció la Reina para cederle total protagonismo al festejado, pero al parecer, como orgullosa madre, abuela y bisabuela, la monarca ha querido darle un papel protagonista al retrato. La última imagen de esta primera sección es la del Rey George VI, padre de la Reina y a quien siempre recuerda con enorme cariño. La fotografía muestra a un joven, en ese entonces Príncipe Alberto -que para esas épocas no tenía esperanzas de llegar al trono siendo el segundo en la línea de sucesión detrás de su hermano mayor-. Enfundado en su galante uniforme de la marina, el padre de la Reina veía solemnemente a la cámara sin anticipar su destino. A pesar de que han pasado más de 66 años de su fallecimiento, la Reina lo sigue recordando con enorme cariño y cada año espera hasta que pase el aniversario de su muerte en febrero, antes de regresar a Londres para retomar su calendario. En una mesa de café a las espaldas de la Reina continuaron los recuentos de la Reina, comenzando con la postal que los Duques de Cambridge eligieron para su tarjeta navideña. Tal vez por mostrar a un Príncipe Louis más crecido, la Reina eligió esta imagen conmemorando la llegada del tercer hijo del Príncipe William y la Duquesa de Cambridge -Kate Middleton-. Aunque la realidad, creemos que la elección se basó en lo encantadora que es esta foto que ha dado la vuelta al mundo. Al centro y en un lugar principal, la boda de la Princesa Eugenia y Jack Brooksbank también estuvo presente. La imagen que eligió la monarca fue uno de los retratos oficiales de la celebración, precisamente la que protagonizan los novios con todos sus pajecitos, entre quienes se encuentran todos los bisnietos mayores de la Reina -únicamente faltan Louis y Lena, hija menor de Zara Tindall-. Con una sola imagen, la orgullosa Reina incluyó a los más pequeños de la familia y uno de los eventos más importantes del año. Por último, la boda del Príncipe Harry y Meghan Markle también tuvo su lugar. En este caso, la Reina eligió uno de los retratos oficiales, en el que se ve a los novios enamorados posando en las escaleras del Castillo de Windsor antes de su recepción nupcial. En un resumen total, este año quienes más apariciones tuvieron fueron sin duda el Príncipe George y la Princesa Charlotte, que a su corta edad se han vuelto protagonistas de tiernos momentos. Pero como cada año, se espera a ver quiénes serán los que llevarán la batuta en el 2019. --

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