Cuando su hija fue agredida en un salón de la Secundaria Técnica 55 de Ciudad Sahagún, Hidalgo, no había un maestro presente. En una escuela conocida por sus problemas de acoso escolar faltaban docentes para cubrir todas las clases, denunció Marcelino. De acuerdo con su testimonio, dichas omisiones hicieron posible el ataque, cuyo video se hizo viral en redes sociales. La agresión surgió repentinamente de dos niñas que buscaban pleito, aunque ella no reaccionó a la provocación. Según el padre, permaneció estoica porque en su casa le enseñaron a no golpear a otros. "Se pudo haber prevenido teniendo toda la plantilla de profesores. Acababan de salir seis o siete por problemas administrativos que tienen entre ellos", reprocha en entrevista. "Mi hija no es la única agredida. Sólo es la única que su caso se ha hecho público", sostiene. Aunque algunas compañeras intentaron salir a buscar algún adulto durante el ataque, dos jóvenes en la puerta se los impidieron. La tarde de ese 10 de enero, Marcelino y los padres de las otras niñas fueron convocados por el director, quien les informó que serían suspendidas tres días por una riña. Fue un día después cuando el padre de familia recibió el video de forma anónima y comprobó que su hija no participó en el pleito. No obstante, bajo el argumento de que no podía expulsarlas, el director sólo sugirió extender la suspensión dos días más. Cuando el video se viralizó una semana después, a la institución llegó la Secretaría de Educación Pública de Hidalgo (SEPH), la Asociación Estatal de Padres y Madres de Familia, así como la Procuraduría Estatal de Protección a la infancia. En una reunión, se resolvió cambiar de plantel a las dos niñas que agredieron a su compañera y proporcionar asesoría psicológica a todas las involucradas, incluyendo a sus familias. Además, Marcelino presentó un acta circunstanciada para que la Procuraduría de Hidalgo investigue a quienes fueron omisos para prevenir y atender el ataque. El padre asegura que no busca venganza, sino ayudar a las jóvenes a reponerse y crear conciencia sobre las consecuencias de la violencia. Señala que, como vocal de la mesa directiva, solicitó por meses implementar, incluso con ayuda del Ejército, programas contra el bullying. Ahora que el caso de su hija se hizo viral en redes sociales y en medios de comunicación, espera que la SEP voltee a ver a todos los niños y niñas que sufren de acoso escolar en dicho plantel. --

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