El técnico del West Ham, David Moyes no le otorgó la titularidad a Javier Hernández, sin embargo, el mexicano demostró que con o sin ella es fundamental en su plantel al entrar de cambio y en tres minutos poner el empate de 1-1 que tanto le había costado conseguir a los visitantes desde la anotación del Chelsea. La escuadra de Antonio Conte recibió al West Ham con una serie de ataques continuos que no cesaron y aturdieron al plantel del mexicano. Cuando todo tornaba con calma, apareció Azpilicueta al minuto 36 y abrió el marcador.

La búsqueda de la igualdad fue el objetivo inmediato de los visitantes, sin embargo nadie auguró la complejidad de éste. En el complemento, Chelsea se mostró más peligroso de la mano de Álvaro Morata. Incluso ellos estaban más cerca del segundo que los Hammers del empate. Al minuto 59 la sonrisa se opaco en los rostros de la afición local cuando el silbante le anuló un gol a Morata después de un gran pase de Willian, la decisión fue correcta, el español estaba medio cuerpo adelantado. Moyes volteó a la banca y llamó a Chicharito para prepararse y entrar al campo al 70'. Tres minutos le fueron suficientes al delantero, tomó un gran pase de Arnautovic en el área y lo mandó directo a la red para el 1-1.

No hubo tiempo para más, Chelsea y West Ham repartieron puntos y el mexicano sumó un gol en su cuenta personal dentro de la Premier League. El mexicano volvió a marcarle al cuadro londinense, su gran víctima de la Premier League, pues le ha marcado en cinco ocasiones tan solo en el torneo de liga, además de ser su cliente en todas la competiciones inglesas.

--

Mediotiempo