Chivas sigue sin ganar en casa, ya llegaron a cinco duelos sin conocer la victoria en el Estadio Akron, y este sábado estuvieron a punto de sumar una derrota más, pero entre Oswaldo Alanís, que empató el partido, y el poste, el resultado ante el Pachuca terminó siendo un 1-1. La noche parecía otra vez negra para el Rebaño, que no gana en casa desde el 27 de octubre del 2017, ya que al menos dos avisos de Rodolfo Pizarro, más un penal no marcado sobre Orbelín Pineda, tenían anímicamente al equipo de Matías Almeyda sobre la lona pese a jugar mucho mejor que su rival, pero en los últimos 20 minutos se aclaró el panorama, aunque también se salvaron. Pizarro tuvo un par de jugadas de peligro. Al minuto 3 mandó su primer aviso, sin embargo, terminó estrellando el balón en el travesaño; dos minutos después, su cabezazo fue detenido por el portero, Alfonso Blanco. Al 15’, Orbelín cayó dentro del área por una falta de Raúl López, misma que no fue marcada por el silbante, Jorge Antonio Pérez Durán. Alan Pulido estrelló otro balón en el poste Tuzo, parecía que el destino no quería que el Guadalajara anotara esta noche. Todo se complicó cuando Ángelo Sagal abrió el marcador al 71’, al rematar dentro del área un centro por izquierda de Erick Gutiérrez. El panorama en el Estadio Akron era de tensión, ya que Chivas no podía perder de nuevo en casa.

Fue entonces cuando al 73’, Pérez Durán marcó como penal un recargón de López sobre Pulido. El destino puso a Alanís como el encargado de darle vida al Rebaño y lo hizo al 75’ al anotar el penal.

Con el empate, Chivas intentó llevarse el triunfo, hasta que Alanís parecía que se vestía de villano y cometió un penal sobre Sagal al 84’, mismo que reventó el poste izquierdo para, al menos, dejarle a los tapatíos la sensación de ser mejores en el campo y lograr un punto, aunque sabe a poco.

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Mediotiempo