Las instituciones bancarias continúan con la alta aglomeración de personas que buscan hacer sus servicios, y a pesar de que al interior de los bancos solo permiten el ingreso de un número reducido de personas para evitar abarrotar los espacios.

Pero las largas filas de quienes esperan un turno son grandes, y quienes buscar resguardarse del sol y el calor ocasiona que la ciudadanía no respete la sana distancia entre una persona y otra que se ha recomendado de al menos dos metros. Igualmente, por la alta concurrencia, personas han buscado hacer ameno el tiempo de espera fuera de las instituciones. Fue el caso de una señora que afuera de un banco en plena Plaza de los Fundadores motivaba al resto de los asistentes para hacer ejercicio, mientras ocupaban un turno y fueran atendidos por el banco. Con aplausos y gritos motivacionales algunos se sumaron a esta práctica, mientras que otros, sólo observaban.