Termina un año muy mediocre para la economía mexicana. Es mala noticia para el gobierno, y peor para los mexicanos: crecimiento nulo; inversión desplomada; desconfianza en el sistema de justicia; incertidumbre sobre el futuro comercial; acoso fiscal; informalidad rampante; inseguridad generalizada. Los factores positivos son que el T-MEC sigue ahí; que el Banco de México mantiene su independencia; y que no nos han bajado el grado de inversión. Pero no fue un buen año.

El problema grave para el gobierno es que nuestro principal socio comercial, Estados Unidos, terminará creciendo a un ritmo siete veces más rápido que nosotros. El secretario del Tesoro de EUA, Scott Bessent, ha estimado que ese país podría terminar creciendo tres por ciento este año. Es un crecimiento potente que refleja que las políticas económicas del presidente Trump sí están funcionando, pero que tristemente ya no se traducen en vigor contagiado para México.

Encima de todo, tenemos falta de liderazgo económico, con los empresarios confrontados por el ruido insertado por Carlos Slim en la interlocución oficial, y ausencia de facto del secretario de Hacienda, Édgar Amador, encargado únicamente de vigilar las finanzas públicas, pero con escasa entrada en el diseño del rumbo económico.

2025 no tenía que ser así para la presidenta Claudia Sheinbaum. Su primer año al frente del gobierno debió estar marcado por un potente acompañamiento de empresarios, por incentivos funcionales para la inversión y por gobiernos locales comprometidos con su Plan México. Pero no fue así y la estimación de Hacienda, en sus Criterios Generales de Política Económica del año que está por terminar, fue errática. Ahí había dicho que creceríamos entre 2.0 y 3.0 por ciento. Pero quedaremos en 0.5 por ciento, si bien nos va. La pregunta es a quién hará responsable la presidenta de tan grave error, que implicó estrés para las finanzas públicas y riesgos de endeudamiento futuro que no deseaba tener al cierre de este año.

Véase la gran diferencia del resultado económico que tiene México con el de EUA. Antenoche, Donald Trump anunció que en 2026 habrá devoluciones masivas de impuestos allá (“la más cuantiosa de todos los tiempos”). Ese es un mensaje potente, que nos contrasta. Mientras, en México todos los contadores, empresas y profesionistas están en modo de alerta, esperando la siguiente cuchillada del SAT.

TOTAL PLAY

La agencia Fitch subió la calificación de deuda de Total Play y le puso perspectiva estable. Hay una notoria mejoría en la posición de liquidez de la empresa y muy buena perspectiva en la generación de flujo de efectivo de aquí al 2029. Muy bien.

VACACIONES

Inicio mi período vacacional de Navidad. Disfruten las fiestas y que 2026 sea un buen año para todos. Nos leemos de vuelta aquí el 5 de enero.

POR: CARLOS MOTA

COLABORADOR

TIKTOK: @SOYCARLOSMOTA