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La administración de gobierno de Juan Manuel Carreras López debería ser saludada hoy con muestras de reprobación por su fracaso en la responsabilidad de cuidarlas a ellas especialmente
01:04 domingo 25 noviembre, 2018
QUEBRADEROCon 53 mujeres asesinadas, San Luis Potosí conmemora este domingo 25 de noviembre el Día Internacional para Eliminar la Violencia de Género. Justo es decirlo, es también un día en que necesariamente hay que reprobar la notoria incapacidad de las instituciones públicas del Estado para atenuar el creciente grado de violencia contra mujeres y niñas. La administración de gobierno de Juan Manuel Carreras López debería ser saludada hoy con muestras de reprobación por su fracaso en la responsabilidad de cuidarlas a ellas especialmente. Hace unos días, un funcionario de segundo nivel del gobierno estatal reconoció el fracaso de la Alerta de Género, dado que ésta junto con las acciones implementadas por las autoridades, han sido del todo insuficientes para enfrentar la violencia criminal contra las mujeres. Ulises Valencia, subsecretario de Derechos Humanos y Asuntos Jurídicos del aparato burocrático de Carreras, admitió que “mientras muera una sola mujer, niña o adolescente, las autoridades estatales habrán fracasado”. Eso supone que han fracasado en primerísimo lugar, el gobernador Juan Manuel Carreras López así como la fantasmal estructura gubernamental que debiera implementar estrategias para detener la violencia contras las mujeres. Pero Carreras es apenas el primer responsable del fracaso. Le siguen los alcaldes y muchos funcionarios públicos más que han sido rebasados ampliamente por tan dramático fenómeno de violencia. 53 veces ha fracasado Carreras porque son 53 las mujeres asesinadas hasta el día de ayer. El mismo mandatario ha dicho sobre los feminicidios que en su gobierno se actúa bajo la base de la cero tolerancia, pero la realidad aplasta esa clase de dichos que no van más allá de la simple verborrea. El primer caso ocurrido este año fue el día 4 de enero. En un sendero que corre en paralelo a las vía del tren México-Nuevo Laredo, pero en terrenos de la comunidad de Rancho Nuevo, municipio de Soledad de Graciano Sánchez, fue localizado el cuerpo de una mujer de tez morena y delgada. Yacía sobre el camino polvoriento donde fue ejecuta y después, decapitada. Unos jornaleros que pasaban por el lugar avisaron a la policía poco después de las nueve de la mañana del 4 de enero. La joven de unos 25 años de edad no fue identificada. El más reciente ocurrió hace apenas ayer, 24 de noviembre: Aproximadamente a las 7 de la mañana de este sábado 24 de noviembre, una joven de 25 años caminaba por la calle Vicente Guerrero en la Delegación Municipal de La Pía cuando de súbito, fue agredida por un sujeto que le disparó y la dejó mortalmente herida. Minutos después aún con vida, fue trasladada por paramédicos de la Cruz Roja al Hospital Central Ignacio Morones Prieto donde falleció. Frente a actos tan atroces, las autoridades locales, como sucede a nivel federal, se responde con la natural simulación de una clase política acostumbrada a darle la vuelta a los problemas. Se implementan algunas acciones viciadas de origen al apoyar y dar recursos a organizaciones de amigos o allegados a funcionarios de primer nivel. El influyentismo y el amiguismo por encima de la emergencia. El fracaso del gobierno de Carreras López ante el grave reto de poner freno a la violencia contra las mujeres y las niñas es monumental y representa un agravio a la sociedad. Hasta ayer, 52 mujeres asesinadas. En 2017 fueron 27. Ese es el tamaño del fracaso gubernamental.