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Un total de 107 pacientes llevan más de 50 años internados en hospitales psiquiátricos al haber sido abandonados por sus familiares
15:51 domingo 30 diciembre, 2018
MéxicoAlgunos llevan más de 50 años internados en hospitales psiquiátricos. A todos, los abandonaron sus familiares, a veces incluso sin dejar ni su nombre. Son 107 pacientes que llegaron a reclusorios, el DIF o psiquiátricos como el Fray Bernardino Álvarez, el Infantil Juan N. Navarro o incluso la desaparecida Castañeda. Sin nadie que respondiera por ellos, terminaron en el Hospital Samuel Ramírez Moreno. "Nadie los quiere en ningún lado", lamenta César Javier Bañuelos, director del Psiquiátrico ubicado en Chalco, Estado de México, y en donde hay pacientes que viven ahí desde que se creó el hospital. El psiquiatra detalla que la institucionalización acelera el deterioro de las habilidades psicosociales, por ello, en 1994 implementaron un programa y lograron restituir a 60 pacientes. "A mí me tocó ir a Mexicali, Hermosillo, Ciudad Juárez y Piedras Negras, y así como yo otros psiquiatras fueron a otras casas a entregar pacientes. Fue un éxito para la institución y para los pacientes porque regresaron a su medio familiar. "Por lo menos los recibieron, algunos familiares abiertamente a regañadientes, pero los recibieron. Les informamos el tratamiento y su siguiente cita externa; muy pocos regresaron", cuenta. El especialista además señala que otro programa exitoso son los paseos quincenales a espacios abiertos como el Palacio de Bellas Artes, Zócalo y el Barrio Chino, entre otros.
"Eso no tiene nada que ver con la psiquiatría, pero tiene que ver con la vida", asegura. Aunque precisa que no siempre cuentan con los recursos para llevar a cabo estos planes, pues de los cerca de 33 millones de pesos anuales que recibe el hospital, hasta 80 por ciento se consume en alimentación, vestimenta y medicamentos para estos pacientes. El director también detalla que algunos jamás dejaron el hospital, pues tras su muerte, sus cenizas han sido esparcidas por los jardines de la institución. "Los hemos tenido en una estancia promedio de 35 años, sin embargo, hay algunos que llevan 51 años con nosotros", cuenta. En el nosocomio todavía quedan tres o cuatro pacientes de más de 80 años de edad que vivieron en la Castañeda, manicomio general, que fue construido en el Porfiriato. La mayor parte de los pacientes padece retraso mental profundo y epilepsia; otros fueron diagnosticados con esquizofrenia, trastorno bipolar o padecimientos mentales originados por el consumo de drogas, dice. Y, aunque el retraso mental profundo no es propiamente una enfermedad mental, sino un mal de tipo neurológico, llegaron a este hospital, menciona. Además, de acuerdo con Bañuelos, debido a que ha pasado el tiempo los enfermos también desarrollaron enfermedades crónico degenerativas como diabetes o hipertensión, sin mencionar a quienes además de un mal mental tienen cáncer. El psiquiatra detalla que en la actualidad es muy difícil el abandono de pacientes, pues en los hospitales ya existen protocolos que ayudan a prevenirlo. Por experiencia propia, relata que los casos de abandono son desoladores e increíbles, en términos de que se violentan muchos derechos básicos. Por ejemplo, rememora, en 2013, 40 pacientes que fueron trasladados de un hospital psiquiátrico de Hidalgo no tenían ni siquiera nombre. "No tenían identidad. Era una deuda muy vieja con el primero y más importante de los derechos humanos; es decir, el hecho de que toda persona tiene derecho a una identidad jurídica a través de un nombre", cuenta el médico. Por su parte, Eduardo Ángel Madrigal León, director del Instituto Nacional de Psiquiatría, señala que no debería existir ningún paciente psiquiátrico hospitalizado de manera permanente; sin embargo, admite, que en la mayoría de los 41 psiquiátricos del País aún hay este rezago por el abandono familiar. "(Los pacientes internados) estarán de manera permanente porque no hay ninguna instancia que se haga cargo de ellos", lamenta. -- Reforma