Los aranceles que aplicó México a los productos procedentes de Estados Unidos podrían no tener los efectos deseados, advierten expertos. Hugo Perezcano, director alterno del Centro Internacional para la Innovación en Gobernanza de Canadá, dijo que estos aranceles han sido fórmula probada en casos pasados, pero la Casa Blanca actual no es la habitual y los resultados podrían variar. "Si este fuera el mundo normal del comercio internacional, cuando hay una diferencia legítima sobre alguna disposición de las reglas, el curso normal de solución de controversias sería otro. "Pero desde que llegó Donald Trump al poder esto no ha sido así y hay diferencias considerables sobre cómo piensan deben operar las reglas comerciales", explicó. Quien fuera titular de la Unidad de Prácticas Comerciales Internacionales de la Secretaría de Economía durante varios años dijo que esto no es todavía no es una guerra comercial, pero es el preludio a una. Explicó que una vez que las medidas se adopten habrá que medir la respuesta y ver si el asunto queda contenido ahí o hay una respuesta de Estados Unidos. En marzo de 2009, el Ejecutivo mexicano decidió adoptar una serie de aranceles a 89 productos estadounidenses, luego de que dicho país canceló el proyecto de transporte transfronterizo. Luego, en agosto de 2010, esos aranceles se aplicaron a 99 productos y se pretendía un nuevo "carrusel" para imponer sanciones a otras importaciones, pero el Gobierno de Barack Obama envió un paquete para que el programa transfronterizo pudiera ser reestablecido. -- Reforma