El gobernador Rodríguez Calderón nada más no entiende que la responsabilidad de los penales es de su administración. Bueno pal “feisbuc” las redes sociales y la “raza”, olvida esta tarea de gobierno. Bajo su mandato se han registrado más de cuatro enfrentamientos al interior de centros de reclusión en la entidad, siendo el más grave el de Topo Chico, en febrero del 2016. En esa ocasión perdieron la vida 49 personas. Pero ni con ello ha dedicado atención al tema. Ayer, de nueva cuenta, un enfrentamiento en el de Cadereyta tras lo cual, vino el vacío de información de parte de la autoridad lo que provocó que familiares se arremolinaran a las afueras y el conflicto creció también extra-muros. Ahí están las aspiraciones presidenciales, sus andanadas en contra de los medios de comunicación, pero también los hechos. Si por el manejo penitenciario le evaluaran de Bronco no quedaría ni un Pony.