Vínculo copiado
#ESNOTICIA
#ESNOTICIA
Erika Salgado
11:44 jueves 1 marzo, 2018
EN LA OPINIÓN DE ERIKA SALGADOLas campañas electorales son ese momento de buenos y malos, de héroes y villanos, en que cada partido y candidato busca mostrarse como la mejor opción ante los electores, pero también es el momento que aprovechan los opositores para mostrar los archivos ocultos, lo más turbio, e incluso, cualquier cosa que pueda servir para demeritar, para lastimar la confianza y restar votos. Es justo a lo que nos enfrentamos hoy día, en esta elección del 2018 se sacan muertos del closet, señalamiento y acusaciones, que si bien pueden estar sustentadas, se presentan justo en estos momentos. El enriquecimiento de Ricardo Anaya, el desvío en Sedesol, de qué vive AMLO, son algunos de los temas que acaparan el debate entre los aspirantes a la silla presidencia, sus equipos de campaña, sus defensores y detractores. La agenda de los partidos y sus candidatos no corresponde a la de la ciudadanía, pues si bien preocupan estas “irregularidades”, lo ideal sería que se dirimieran y quedaran aclaradas por la vía institucional y que la agenda de los candidatos fuera una agenda de propuestas ligadas a las necesidades y demandas de los ciudadanos. Mientras se libra la séptima batalla de renegociación del TLC que amenaza con extenderse más allá de esta administración federal, ningún candidato se muestra con una propuesta clara de renegociación, llegarán en frio a la mesa donde la renegociación avanza desde hace meses. Cada día vemos como la gasolina y en general los energéticos aumentan su precio de manera desproporcionada, mientras los aspirantes presidenciales siguen enfrascados en de quien fue la culpa, no se plantean medidas de solución a un problema que está golpeando y en serio, el bolsillo de los ciudadanos. La reconstrucción de las zonas afectadas por los sismos no se concluirá en estas administraciones en curso, y tampoco hay proyectos claros a futuro. Las cifras de inseguridad y las victimas de la delincuencia crecen cada día y no se ve un plan de acción de ningún partido y de ningún político que aspire al poder. Podríamos seguir con la lista interminable de temas urgentes a atender, y en todos, podríamos coincidir que no hay un proyecto definido y compartido por parte de los candidatos y no lo veremos en las campañas pues la estrategia para “ganar” elecciones se sigue centrando en desacreditar al de enfrente y no en convencer por merito propio. Es una pena que un proceso democrático que nos cuesta tanto a los mexicanos, nos deje tan poco, pues al paso que vamos lo más recordado de estas precampañas y campañas será la canción de Movimiento Naranja. Por cierto, en SLP ni candidatos definidos tenemos hasta ahora para la alcaldía de la capital, pues tanto PRI como PAN están apostando al vencimiento del plazo, este viernes, para definir su van a no a jugar con los partidos con los que cada uno se está aliando, si el PAN cede al PRD le estaría entregando no sólo la capital otros 3 años, estaría, además, renunciando a la posibilidad de ser oposición en ese mismo periodo, pues al avalar a un candidato no podrá después desligarse de su gobierno. En el caso del PRI o logra imponer a su candidat@ o pierde lo que le queda de fuerza en nuestra entidad, pues sería más que dramático que terminara permitiendo que sea el PVEM, Nueva Alianza o Conciencia Popular quien le imponga al abanderado.