Gracias a la importante alianza que el Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) ha formado con la empresa Robert Bosch en San Luis Potosí, personas con discapacidad recibieron sillas PCI y PCA, las cuales les permiten tener una mejor calidad de vida y hacen efectivo su derecho a la movilidad. Con la presencia de familiares de las personas beneficiadas, Lorena Valle Rodríguez, Presidenta de la Junta Directiva del DIF Estatal, reconoció la generosidad y responsabilidad social de Robert Bosch y agradeció la presencia de Gunter Daut y de Markus Groeger, Vicepresidente y Vicepresidente Técnico Comercial de Robert Bosch Planta San Luis Potosí, para conocer a quienes recibieron las sillas. Resaltó la importancia de que las personas con discapacidad cuenten con este tipo de sillas, para que puedan estar más cómodas y seguras, además de tener una mejor calidad de vida. Finalmente, reiteró el agradecimiento a la empresa por aliarse con DIF Estatal para apoyar a personas con discapacidad. Por su parte, el Vicepresidente de Robert Bosch Planta San Luis Potosí, destacó el interés de la empresa para realizar acciones por el bienestar de la población potosina que lo necesita. En ese sentido explicó que además de la donación de las sillas para personas con discapacidad, se ha apoyado a DIF Estatal con otras acciones. Adelantó que la empresa donó el equipamiento para lo que será la “Sala Robert Bosch”, la cual se inaugurará próximamente en el Centro Crecer para la Vida ubicado en la colonia Rivas Guillen.  En la entrega de las sillas a una persona adulta y 5 niñas y niños de la Delegación La Pila, la capital, Villa de Reyes y Villa de Zaragoza, se contó con la presencia de Cecilia de los Ángeles González Gordoa, Directora General de DIF Estatal y Guillermo Sánchez Berrones, Director de Integración Social de Personas con Discapacidad. Cabe destacar que las sillas llamadas PCI (para personas con parálisis cerebral infantil) y PCA (para personas con parálisis cerebral adulta), tienen características específicas, por lo que son más caras que las convencionales. El donativo de la empresa Robert Bosch a través de las sillas, ascendió a más de 50 mil pesos.