Aunque las peticiones de asilo en México se han disparado en los últimos años, las autoridades migratorias han dosificado el aval a estos trámites. En febrero pasado, distintas organizaciones denunciaron que la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) tenía rezagadas más de la mitad de las 14 mil 596 solicitudes de asilo que recibió en 2017. Advirtieron que si bien las peticiones crecieron, la capacidad del Estado para procesar y brindar protección internacional no se ha desarrollado al mismo ritmo. Incluso en ese mismo mes, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) hizo un llamado urgente al Gobierno federal ante lo que calificó como "posible colapso" del sistema de protección a refugiados. "Es necesario y urgente que el Gobierno federal dé una clara señal del compromiso que mantiene a su tradición de asilo y refugio, la cual ha caracterizado a nuestro País a lo largo de los años, y nos permita mostrar a nivel internacional que, ante los discursos de odio y tendencias políticas que cierran puertas, levantan muros o alientan la exclusión, el fanatismo y la violencia contra quienes son distintos y contra colectivos vulnerables y minorías en riesgo, nuestro País mantiene sus puertas abiertas para todas aquellas personas que requieren protección internacional", demandó la CNDH el 25 de febrero. Según las organizaciones, de las solicitudes hechas el año pasado, sólo mil 907 habían sido avaladas, 7 mil 719 seguían en trámite y 392 recibieron protección complementaria. De acuerdo con cifras oficiales, en el sexenio de Enrique Peña Nieto las peticiones de asilo han aumentado 10 veces. En 2013 se hicieron mil 296, en 2014 hubo 2 mil 137, en 2015 se registraron 3 mil 424, y en 2016 la cifra se ubicó en 8 mil 796. Este aumento es atribuido por las autoridades al deterioro de la situación de los países de origen de los peticionarios, como el recrudecimiento de la violencia y la crisis política. Actualmente, el 82 por ciento de las solicitudes de asilo que recibe la Comar son de ciudadanos de Honduras, Venezuela y El Salvador; el año pasado, habitantes de dichos países presentaron 4 mil 272, 4 mil 42 y 3 mil 708 peticiones, respectivamente. Por debajo de estos tres países, están Cuba, que sumó 796 el año pasado; Guatemala, con 676; Haití, 436; Estados Unidos ,106; Camerún, 105; Colombia, 96; Israel, con 81, y Nicaragua, con 62. En 2016, las naciones que ocuparon los primeros lugares por número de solicitantes fueron Honduras, El Salvador, Guatemala, Venezuela y Nicaragua. -- Reforma