El mazapán mexicano también será manufacturado por costarricenses a partir del próximo año. Dulces De la Rosa abrirá su primera planta en el extranjero en Costa Rica en 2019, con una inversión de 10 millones de dólares. La empresa jalisciense creará 150 empleos en ese país para fabricar mazapanes, chocolates, malvaviscos y chicles a fin de abastecer la demanda de Centroamérica y Estados Unidos, sus dos mercados más importantes después de México. Con esta nueva unidad, y la ampliación de sus líneas de producción en Jalisco, De la Rosa crecerá 10 por ciento su producción, dijo Enrique Michel Velasco, socio mayoritario de la compañía mexicana. “De malvaviscos vamos a tener una capacidad de 2 mil 500 kilos hora, dos toneladas y media por hora. De mazapanes vamos a producir mil 400 por minuto (en Costa Rica)”, indicó el empresario. La empresa Dulces De la Rosa tiene 70 años de historia, cuenta con cuatro plantas: una en Tlajomulco de Zúñiga, dos en Tlaquepaque, y una más en Guadalajara, Jalisco, para exportar a 34 naciones. Al día fabrican 9 millones de mazapanes, su producto emblemático. Enrique Michel explicó que eligió una zona “franca” cercana a San José, Costa Rica para instalar su primera fábrica de dulces fuera de México por los incentivos fiscales, como la exención del Impuesto sobre la Renta (ISR). La decisión tiene su origen en el crecimiento sostenido que ha tenido la marca mexicana. En 2017 registró 3 por ciento más de ventas y cerrará este año con un crecimiento del 17 por ciento. “Representa como unos 800 tráileres más de producción en el año. Hemos crecido una enormidad”, destacó Enrique Michel.

-- EL FINANCIERO