Justo a unos pasos de donde se ubican los murales en los pilares de los brazos del Distribuidor Juárez con motivos de homenaje a las víctimas de la pandemia del Covid-19 y el personal de Salud, los accesos al distribuidor se han vuelto un auténtico basurero en el cuál se ha pudo registrar de manera gráfica que los camellones han sido ignorados en la manita de gato que le dieron a la Glorieta Juárez. Uno de los trabajadores de imagen pública del ayuntamiento capitalino, nos comentó que en los camellones y en los costados donde pasa el tráfico vehicular suele llenarse de desechos pues las personas por no llevar la basura en auto prefieren tirarla: ‘’Las personas van comiéndose unas papas, y como no quieren traer la bolsa en el carro la tiran en donde se les hace más fácil’’.

Además de las diversas enfermedades que se puede adquirir al dedicarse a recoger los residuos que dejan las personas, con la pandemia corren el riesgo de contagiarse del virus Covid-19 pues las personas llegan han llegado a tirar cubrebocas sin tener alguna medida preventiva para deshacerse de ellos.

Hizo un llamado a la población para que sean conscientes de que existe una acumulación de basura en esta zona y que no solo representa un factor para la inundación de las alcantarillas por el exceso de residuos, sino también son un foco de riesgo de infección ahora por los tapabocas que se han encontrado en esta zona.