El hombre es el propio lobo del hombre. ( Homo homini lupus) ¿entre más civilizado, más letal su conducta? Los horrores de los que es capaz la humanidad, están quedando de manifiesto en la lucha por el poder y el dinero públicos.  Es y, debe de ser la hora del Estado Mexicano. El poder se ejerce no se implora. 

El  estado de derecho, tiene que imponerse, ante la barbarie de lo que vivimos y como oposición a la impunidad de las personas que se han decantado por delinquir. Lo que debería ser una fiesta democrática, se está convirtiendo en una tragedia, ensangrentando nuestras elecciones y, valla que es en ellas en donde decidimos nuestro futuro, inmersos en la globalizada política social y económica, aparte de otros temas de importancia, que se encuadran en las relaciones internacionales. Más de ciento treinta homicidios en torno a las campañas políticas de México, al rededor de 14 de ellos, eran candidatos asesinados, más las ejecuciones que se cuentan por miles ya, no sólo en lo que va de este sexenio, también, en lo acumulado que, desde luego han de ser mucho más. Realmente no sabemos si esto pasaba antes de que, las redes sociales iniciarán su aparición en la vida gregaria, relacionando a las personas con situaciones que se cuentan, unas con responsabilidad, otras, con falta de respeto y desde luego sin la corresponsabilidad que debería haber pero , con la diferencia que se cuenta ya, lo que antes sólo una porción cerrada de la población conocía. ¿Es la hora del Estado Mexicano? debe de ser, la seguridad de las personas ha estado en riesgo ya por mucho tiempo y el miedo se apodera del comportamiento social, provocando una vez más, la disociación del conjunto y, lo que es más penoso, la desconfianza de quienes no deberíamos, hasta de nuestros vecinos. No sólo las personas están en peligro, también las instituciones a las que todos quisiéramos acogernos pero, no hay respuesta adecuada. ¿Estarán superadas?  La ola de violencia que vivimos, tiene la posibilidad de ser usada para alejar a la población del cumplimiento cívico para ejercer el día uno de julio, la obligación cívica de votar. Niveles de votación bajos, no nos hacen bien y ante la opinión pública Nacional y desde luego la internacional, pareceríamos como un Estado que ha fallado en la continencia del los delitos generando impunidad como paraíso de la delincuencia. Es la hora del Estado Mexicano. El poder Constitucional de las autoridades, rectoras de las instituciones, ha estado a prueba, ya por mucho tiempo. Es, como debe ser o, ha debido ser, la hora de ejercitar esta realidad legal, la potestad para proteger a los ciudadanos mexicanos. Dejar de hacerlo, incrementa, como hasta ahora, la impunidad, haciendo muy fácil el camino delincuenciales.  México, nuestro País y, nosotros los mexicanos, merecemos mejores formas de vida. Todos tenemos responsabilidad en ello. Los ciudadanos, abocados a la prevención, con ejemplo de cumplimiento de la ley. Las autoridades por su parte, castigar a los delincuentes, abatiendo la impunidad con métodos verdaderamente de vanguardia y científicos. ¡Es la hora del Estado Mexicano! @jaimechalita