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Al día de hoy, los talibanes controlan más territorio que su gobierno de hace dos décadas, y están más fuertes que nunca, como ejemplo de ello si bien se veía inevitable que retomaran el poder tras la retirada de las tropas, nunca se pensó que fuera tan rápido
21:15 viernes 27 agosto, 2021
ColaboradoresNuevamente volvemos a tener a Afganistán en los encabezados, habiendo tomado fuertemente el ojo internacional después de los ataques a las Torres Gemelas el 9 de septiembre del 2001, y posteriormente por la invasión militar de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) a dicho país a fin de controlar las células terroristas de los talibanes y Al- Qaeda.
20 años después, presenciamos una histórica retirada de las tropas americanas, que deliberadamente dejan al país nuevamente bajo un completo dominio de los talibanes y con ello la posibilidad de que grupos yihadistas como Al- Qaeda o militantes del “Estado Islámico” (ISIS) derrotados en Irak y Siria, tomen impuso en el vacío de poder en Afganistán.
Los talibanes o “estudiantes” en el idioma pastún, iniciaron con Mula Omar, clérigo del Islam que precisamente reclutó a estudiantes, la mayoría huérfanos por las guerras y les ofreció lo que el país no pudo, educación y un propósito. Omar los disciplinó en una interpretación fundamentalista de la sharia (ley islámica) y en una fuerza de guerra. Los talibanes y muyahidines (combatientes por la yihad -guerra santa- armada) se fortalecieron militarmente con el apoyo de Estados Unidos, para que a través de ellos se expulsara a la influencia soviética de Afganistán durante la guerra fría. Después de 10 años de guerra, los talibanes con el apoyo de Estados Unidos, lograron expulsar a la entonces Unión Soviética, probando ser un grupo poderoso, y una vez que tuvieron control parcial del país, brindaron lo que no se había conocido en el territorio por mucho tiempo: orden y una pausa a los abusos e inseguridad, por lo que al inicio fueron bien recibidos por la población, y con el tiempo desarrollaron un gobierno y una economía.
Sin embargo, conforme avanzaron los años y el territorio que controlaban, empezaron a implementar políticas más radicales, de acuerdo a su interpretación particular de la sharia (en el resto de los países musulmanes no se ven estas prácticas, sobre todo con lo relacionado a la mujer). Lo anterior, creció aún más ya que al ganar la guerra contra la Unión Soviética bajo la yihad, atrajo a radicales que buscaban sumar fuerzas para elevar la guerra santa a una global, incluyendo por ejemplo a Osama Bin Laden, quién regresó a Afganistán para liderar a Al- Qaeda bajo el abrigo de los talibanes. Por lo que los “estudiantes” estuvieron en el poder de 1996 hasta el 2001, cuando en el marco de la impopular guerra contra el terrorismo tras el ataque a las Torres Gemelas, el ejército estadounidense junto con la OTAN derrocó al gobierno talibán por sus vínculos con Al-Qaeda, y desde entonces habían estado en células como un movimiento de resistencia en exilio en Pakistán y Afganistán, y a los ojos de la comunidad internacional como un grupo acabado.
Sin embargo, en abril de 2021 la OTAN inició la evacuación de sus tropas en Afganistán, y con ello los talibanes empezaron ganar territorio, en julio ya controlaban la mitad del país y el 15 de agosto con la retirada del presidente afgano Ashraf Ghani Ahmadzai, el gobierno apoyado por Estados Unidos colapsó, y los talibanes tomaron la capital Kabul consolidando el control absoluto en el país. Al día de hoy, los talibanes controlan más territorio que su gobierno de hace dos décadas, y están más fuertes que nunca, como ejemplo de ello si bien se veía inevitable que retomaran el poder tras la retirada de las tropas, nunca se pensó que fuera tan rápido.
Frente a esto, los afganos buscaron desesperadamente esconderse o huir por miedo al nuevo régimen y un posible regreso a violaciones de Derechos Humanos. No obstante, los talibanes saben que la comunidad internacional los observa, por lo que buscan enviar un mensaje de que son diferentes, se dicen ser más pragmáticos y que respetarán los derechos de las mujeres, pero en letras chicas aseguran que ello será “en el marco (de su interpretación históricamente fundamentalista) del Islam”.
El reto hacia adelante para los talibanes es gobernar, ya controlan más territorio que antes, pero no cuentan con un ejército grande, la mayor parte del territorio lo conquistaron conciliando y sin guerra. El pasado jueves, se presenció un primer ataque al territorio talibán por parte de ISIS en el aeropuerto de Kabul, dejando al menos 13 soldados americanos y 90 ciudadanos fallecidos, este lamentable hecho podrá ser usado a favor de los talibanes y al igual que su primera llegada al poder en los 90s, presentarse nuevamente como protectores. Aun así, existe el riesgo de un gobierno radical, que pudiera una vez más presentar un santuario al terrorismo y oprimir a la población, en particular a las mujeres.
Por otro lado, el inédito regreso de los talibanes al poder, presenta un fracaso en la política exterior norteamericana, considerando que es la guerra más larga en la que ha estado Estados Unidos, con un costo de más de $2 trillones de dólares, esto es $300 millones de dólares por día, cada día por 20 años. Dicho costo no termina con el retiro de las tropas ya que, al ser dinero prestado, para el 2050 se estima un interés de $6.5 trillones de dólares, aproximadamente $20,000 dólares por cada ciudadano americano y una carga económica que trascenderá generaciones. Lo anterior, dejando como resultado a los talibanes nuevamente en el poder y mucho más fortalecidos, cuando la invasión buscaba precisamente destruirlos.
Twitter: @Noemihrb