Existen más de veinte denuncias penales en la Fiscalía General contra ex diputados locales, por falsificación de firmas y utilizar documentos apócrifos. Ya han pasado tres largos años y es evidente que los están encubriendo y protegiendo. ¿Usted por qué cree que el diputado Pedro Carrizales mejor conocido como “el mijis”, presuntamente falsificó documentos que lo acreditan como parte de las etnias huastecas, para así presentarse ante el INE y poder obtener una diputación federal plurinominal como cuota indígena? La respuesta es simple, por la impunidad al ver que los ex diputados siguen intocables. Si la Fiscalía hiciera su trabajo, se hubieran sentado las bases para que cualquier diputado le pensara dos veces cometer algún ilícito, pero, así como están las cosas, sucede todo lo contrario. Por lo que se vio esta semana, las elecciones estatales, se van a convertir en un ring para personajes nacionales. La coalición “Sí por San Luis” tendrá entre sus filas a Javier Lozano, provocador y bravucón ex panista, que estuvo en la campaña de Juan Antonio Meade en las pasadas elecciones federales. El verde por su parte se trae al impresentable Arturo Escobar, experto en violar la ley electoral y con enormes mañas. Se espera más guerra sucia y enfrentamientos cotidianos entre estos personajes que le robarán reflectores a los candidatos Octavio Pedroza y Ricardo Gallardo. Respecto a la iniciativa de la prestigiada organización Transparencia Mexicana y la CEGAIP para que los diversos candidatos a elección popular, presenten de manera pública su #3De3 (declaración patrimonial, fiscal y de interés), lamentablemente la cosa va muy lenta y apenas esta semana Octavio Pedroza la entregó.  Finalmente, le cuento que el pasado lunes, ya que hablamos de la Comisión Estatal de Garantía de Acceso a la Información Pública (CEGAIP), su titular David Enrique Menchaca fue llamado a comparecer ante el Congreso. La diputada que preside la Comisión de Transparencia, Isabel González le cuestionó la tibieza para obligar a los entes a cumplir con la ley y sancionarlos. Lamentablemente, el mismo Congreso del Estado es de los más opacos y que se niegan sistemáticamente a cumplir plenamente con la ley. ¿Así como exigen y con cual autoridad?