A través de Facebook llegó la buena noticia: la empresa danesa The LEGO Group abrirá una tienda en México, la cual se ubicará en el Centro Comercial Santa Fe y quedará abierta al público a finales de febrero, según informó Milenio. La buena nueva se dio a conocer mientras en Canadá se llevaba a cabo la sexta ronda de negociación del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre dicho país, México y Estados Unidos, la cual prácticamente ha tenido resultados nulos. Si bien la apertura de una tienda –aunque sea de la marca más poderosa del mundo, de acuerdo con la consultora Brand Finance, pues ya rebasó a Ferrari–, no generará una gran derrama económica en térmicos de Producto Interno Bruto (PIB), sí es una buena noticia no sólo para los amantes de LEGO, sus sets, figurines, temáticas y homenajes a célebres personajes de la cultura pop. Es un pequeño granito de arena, un recordatorio de que existen otros países más allá del vecino del norte con los cuales se podrían establecer tratados comerciales y alianzas económicas, más aún porque la planta de LEGO ubicada en Monterrey genera la tercera parte de su producción global. La nueva LEGO Store tampoco significará una gran competencia para tiendas departamentales y jugueterías donde se venden estos productos –una de las más importantes es Walmart–, pero los usuarios sí encontrarán sets exclusivos y de colección al cruzar sus puertas. Además, como ha hecho la empresa en las 132 tiendas abiertas en el mundo –83 en Estados Unidos, 14 en Reino Unido, 11 en Alemania, 10 en Canadá, 7 en Francia, 2 en España, Austria, Dinamarca, Bélgica, China y 1 en Suecia–, la mexicana será parte de su cultura empresarial, lo cual todo emprendedor sabe es extremadamente importante dentro de una empresa. Cuando The LEGO Group inaugura una tienda celebra con un evento que dura todo un fin de semana y en el cual un Maestro Constructor –sí, como el de la película– con ayuda de voluntarios, entre ellos niños, crea una estatua LEGO para ser exhibida durante varias semanas. Tanto esta estrategia como sus productos han resultado fructíferos, pues desde 2014 es la empresa de juguetes más importante del mundo, incluso por encima de Mattel. Un poco de antecedentes Aquellos famosos bloques de plástico usados para construir todo aquello concebido por la imaginación –junto con sus minifiguras y otros componentes– son el producto estrella de la empresa danesa The LEGO Group. Desde 1949 la compañía empezó la construcción de los coloridos elementos armables y desarmables. Su descomunal éxito los convirtió en la marca más poderosa del mundo, y cómo no va a serlo si se ha diversificado al grado de contar con películas, videojuegos, ropa, revistas, libros, juegos de mesa, programas televisivos y seis parques llamados Legoland. Comenzaron siendo juguetes de madera, pero con el tiempo se perfeccionaron hasta que en 1958 se patentó el diseño y material utilizado para la realización de los bloques.   LEGO y la preocupación social En 2018 la marca cumple 60 años de existencia y desde siempre ha mostrado interés en la responsabilidad social, un modelo a seguir por cualquier emprendedor, pues podría replicarlo dentro de sus posibilidades y con base en su modelo empresarial. LEGO, por su parte, mandó kits a la Estación Espacial Internacional donde astronautas crearon naves para ver cómo reaccionan ante la microgravedad, todo como parte del programa LEGO Bricks in Space. Asimismo, la marca se ha involucrado en concursos de robótica y esforzado por vincularse con trabajos culturales, libros, creación de arte e incluso por utilizar los bloques en aulas de clase como herramienta didáctica, a través de la LEGO Education North America, parte de la rama de la empresa dedicada por entero a la educación.   Su filosofía también los ha llevado a diseñar sets promotores de la igualdad de género, lo cual ocurrió tras recibir la carta de una pequeña donde se quejaba de la falta de sets para niñas en comparación de la cantidad existente para niños; además, sus personajes no tenían trabajos y se quedaban en casa mientras los masculinos se embarcaban en todo tipo de aventuras. Aunque la marca sostuvo que el lanzamiento del set Instituto de Investigación no fue una respuesta directa a la carta, presenta a un grupo de científicas, entre ellas una química, una paleontóloga y una astrónoma. De cualquier modo, prestar atención a los consumidores siempre será clave del éxito. En términos de medio ambiente, no solo sus plantas están certificadas y cumplen con las reglas de ISO 14001, la alemana funciona con energía renovable y se espera que todo The LEGO Group use este tipo de energía para 2020. También reciclan 90 por ciento de sus desperdicios y para 2030 tienen la meta de utilizar materiales alternativos sustentables, actualmente emplean petróleo para su fabricación. Eso sí, se le ha criticado por su alianza con la petrolera Royal Dutch Shell.  De acuerdo con el grupo, solo 18 bloques de un millón producidos incumplen el estándar de calidad, éstos son reciclados, pero si no pueden usarse en la creación de más bloques, son procesados y vendidos a otras industrias porque sus productos se realizan con una precisión milimétrica y su calidad debe ser absoluta. Finalmente, se encuentra en el lugar 169 de la lista de las mejores empresas en contratar empleados de diversos orígenes y razas. Tal vez ello se deba a que el nombre LEGO proviene de las palabras danesas “LEg GOdt”, cuyo significado es “jugar bien”, y el cual se ha convertido en parte intrínseca de su filosofía empresarial. Bien podría ser el mantra de cualquier emprendedor: juega bien, aunque tu materia prima no sean bloques de plástico. -- FORBES