CIUDAD DE MÉXICO.- El paquete económico 2018 fue presentado el pasado viernes y de acuerdo al Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), muestra señales positivas del compromiso que tiene la autoridad hacendaria para consolidar la salud de las cuentas pública.

Es importante al considerar que mantiene el objetivo de lograr un superávit primario y la disminución de la deuda.

Así, para el 2018 mantiene por segundo año consecutivo el objetivo de un superávit primario, que en esta ocasión prevé que sea equivalente a 0.9 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), lo que en términos monetarios significa un superávit de 197.3 mil millones de pesos.

El documento de Criterios 2018 prevé que la deuda total, medida a través del saldo histórico de requerimientos financieros del sector público (SHRFSP) como porcentaje del PIB, al finalizar el 2018 represente 47.3 por ciento del PIB, 2.9 puntos porcentuales por debajo de lo aprobado para el 2017.

Aún queda mucho por hacer en materia de eficiencia del gasto, sobre todo cuando se aprecia que el gasto de capital vuelve a mostrar un ajuste a la baja respecto a PEF del año pasado, que en esta ocasión es de 20.9 mil millones de pesos, equivalente a una disminución real de 3.4 por ciento.

En materia tributaria, el instrumento principal es seguir fortaleciendo la eficiencia recaudatoria, sobre todo cuando permanece el compromiso de no modificar la carga fiscal. 

Para ingresos, la propuesta proyecta que los recursos que captará el sector público durante 2018 serán de 165.1 mil millones de pesos superiores a la cifra de la Ley de Ingresos (LIF) del año inmediato anterior, lo que significaría un incremento anual de 3.9 por ciento en términos reales.

Al comparar con la cifra estimada de ingresos para 2017, que excluye los recursos provenientes del Remanente de Operación del Banco de México (ROBM), los recursos esperados para 2018 solo serían mayores en 40.7 mil millones de pesos, lo que representa un incremento real de 0.9 por ciento.

Según los Criterios Generales de Política Económica (CGPE), documento que forma parte del paquete económico, este comportamiento de los ingresos se apoya principalmente en un mayor ritmo de crecimiento de la economía.

Contribuirá para que la captación tributaria aumente 3.2 por ciento real. Se anticipa un aumento de los ingresos de organismos y empresas distintas de Petróleos Mexicanos (Pemex) que vendrá, por una parte, del aumento de las tarifas eléctricas y mayores cotizantes en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), como consecuencia de una mayor formalidad laboral.

En el ámbito petrolero se estima que los ingresos aumenten 1.3 por ciento respecto a la LIF del 2017, con un precio del petróleo ligeramente mayor, así como de un modesto repunte den la plataforma de producción de crudo.

Pero también se anticipa un tipo de cambio promedio inferior en 2.7 por ciento, por lo que si se compara con los ingresos estimados para este año, se aprecia una disminución anual de 4.6 por ciento, anotó.

En cuanto al gasto público, apuntó que se tiene previsto ejercer recursos por un monto total de cinco billones 201.7 mil millones de pesos, cifra que supera en 113 mil millones de pesos la aprobada para 2017 y representa un incremento real de 2.2 por ciento.

La comparación con las cifras del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2017 plantea un incremento de 11.3 mil millones de pesos en el gasto programable, equivalente a un incremento real de 0.3 por ciento, y uno de 102 mil millones de pesos en el no programable.

En su publicación “Análisis económico ejecutivo”, el organismo privado señaló que esto implica un crecimiento de 7.3 por ciento, principalmente por el aumento del costo financiero del sector público, que es el origen de 62.2 por ciento de este mayor gasto.

-- EXCÉLSIOR