El suizo Roger Federer explicó en rueda de prensa que, aunque la final perdida con el serbio Novak Djokovic "duele", pasará como con la de 2008y con el tiempo volverá a verla y pensar "que no estuvo tan mal". El helvético sacó en el quinto set para llevarse su noveno título de Wimbledon y dispuso de un 40-15 que salvó Djokovic, a la postre campeón. Intentas olvidar y coger las cosas buenas de este partido que son muchísimas. Es como en 2008. Volveré verlo y pensaré que no estuvo tan mal después de todo. Por ahora duele, como debería, como cualquier derrota aquí en Wimbledon", explicó el suizo.

Soy muy fuerte en pasar página porque no quiero estar deprimido por lo que fue en realidad un grandísimo partido de tenis", agregó el ocho veces campeón en el All England Club, que se quedó a un punto de conseguir su novena corona.

El suizo cayó en la final más larga de la historia de Wimbledon, de casi cinco horas, en el 'tie break' del quinto set. No sé si perder por un triple 6-2 es mejor que esto. Al final, no importa. Puede que te sientas más decepcionado, triste o enfadado. No sé lo que siento ahora. Solo siento que fue una increíble oportunidad perdida. Es algo que no puedo creerme", reflexionó.

Preguntado por las similitudes con la final de 2008 que cedió ante Rafael Nadal, Federer argumentó que esta quizás fue algo más "directa" porque no hubo parones por la lluvia ni la amenaza de la noche. Fue un final épico, ajustado. Claro que hay similitudes, pero hay que rebuscar en ello. Perdí las dos veces, esas es la única similitud que veo", finalizó.

-- Excelsior