Con seis puntos conseguidos de nueve posibles y una filosofía de juego propositiva, Héctor Altamirano escribe sus primeros capítulos como entrenador en la Primera División de la mano de los Gallos del Querétaro. El Pity habló con Excélsior sobre el desafío que vive con el conjunto emplumado y la oportunidad de enfrentarse al Cruz Azul, equipo que le dio la oportunidad de mostrarse como jugador en el máximo circuito. Es un partido hermoso. Les decía a los muchachos que los envidio porque tendrán el privilegio de jugar ante un equipo de ese tamaño en el estadio Azteca. En lo personal, lo voy a disfrutar muchísimo, con la intención de ir a hacer un buen partido y llevarnos los tres puntos”, enfatizó. El estratega asegura que aunque intenta forjar su propia identidad en los banquillos, la influencia de técnicos como Ignacio Ambríz, Víctor Manuel Vucetich y Luis Fernando Tena lo han marcado y ayudado a crecer tanto en lo personal como en lo profesional. Hay técnicos que influyeron en mí, como Enrique Meza y Ricardo La Volpe, pero fundamentalmente me quedo con Nacho Ambriz, con Vucetich y con Luis Fernando Tena porque pude compartir con ellos de manera muy cercana cuando yo estaba en las inferiores de Gallos y por eso pude reflejarme a través de su trabajo. No se trata de copiar, sino de adaptar sus ideas a lo que quieres plasmar en la cancha”.   EXCÉLSIOR