WASHINGTON.- Las sorpresivas victorias de Joe Biden en el supermartes estuvieron impulsadas por votantes que decidieron apoyarlo unos días antes de la cita con las urnas, una ola de impulso tardío que ha sacudido la campaña de las primarias presidenciales del Partido Demócrata en cuestión de horas. Los indecisos ayudaron a Biden a ganar en Massachusetts, Minnesota, Carolina del Norte, Texas y Virginia, entre otros estados. En algunos de ellos, casi la mitad de los votantes decidieron su voto a última hora, según encuestas de AP VoteCast a participantes en ocho primarias estatales y las encuestas mostraron que se decantaron por el exvicepresidente. En Virginia, donde casi la mitad de los votantes esperó para elegir a su candidato, Biden logró el respaldo de dos tercios de los indecisos. Los sondeos mostraron el poder de un repunte en el momento oportuno dentro de la carrera por la nominación demócrata. El triunfo de Biden en Carolina del Sur el sábado pasado revivió su alicaída campaña y en 72 horas sacó a tres de sus rivales de la contienda y convenció a votantes en distintos estados. Sin embargo, el senador por Vermont, Bernie Sanders, encontró una fórmula para amortiguar el golpe. Con una organización agresiva y aprovechando los votos tempranos de su base de progresistas, jóvenes y latinos, Sanders ganó Colorado y California. Alrededor de 80% de los que optaron por el senador en California dijeron que habían elegido a su candidato antes en las últimas horas. California, el premio mayor de la noche, pues otorgó 415 delegados, fue uno de los pocos estados que se inclinó por Sanders, pero Biden ganó Texas, que dio 228 delegados, y otros ocho estados. Sus victorias en Virginia y Carolina del Norte, dos estados que serán cruciales en las elecciones de noviembre, resultaron vitales.

Maine, que cuenta con 24 delegados en juego, fue el último en decantarse a favor del exnúmero dos de Barack Obama, según la proyección realizada por la cadena estadunidense CNN. Hasta el cierre de esta edición, el conteo en California había concedido 135 delegados a Sanders, 83 a Biden y sólo uno a Elizabeth Warren. Quedaban por otorgarse otros 196 delegados de California. Fue una dura contienda para Warren, quien terminó muy por detrás de Sanders y Biden en la mayoría de los estados, incluido Massachusetts, donde es senadora, y triunfó el exvicepresidente, pese a no haber gastado dinero ni desplegado colaboradores allí.

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Con información de Manuel Ocaño

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