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#ESNOTICIA
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¿Tienen las personas en el poder una mayor responsabilidad en la expresión de sus ideas y opiniones?, ¿qué compromisos conlleva la libertad de expresión?
18:00 sábado 9 enero, 2021
ColaboradoresLas palabras tienen consecuencias. Las decisiones tomadas por personas en el poder pueden tener un impacto directo en conductas e instituciones- Justin Trudeau, Primer Ministro de Canadá Como cada 6 de enero del año posterior a las elecciones presidenciales de Estados Unidos, el Congreso realiza el conteo de los votos electorales para certificar los resultados, o en su caso, para refutarlos. Sin embargo, en esta ocasión el proceso iniciado el pasado jueves cuando se inauguraba el Congreso 127, se vio violentamente irrumpido por seguidores del Presidente Trump derivado de su negativa de aceptar la derrota electoral, poniendo por unos instantes en jaque a la democracia americana. Dicha iniciativa, apoyada por una pequeña fracción republicana liderada por Ted Cruz, no precedió dentro del Congreso principalmente debido a que el Vicepresidente Mike Pence y el líder republicano en el Senado Mitch McConnell desecharon el intento de anular los resultados electorales. Cabe resaltar que el Vicepresidente fue duramente presionado por el Presidente Trump para que impidiera la certificación del demócrata Biden. De igual manera, una vez que los manifestantes tomaron el Capitolio fue directamente el Vicepresidente Pence quién llamó a la Guardia Nacional para tomar control de los hechos, a pesar de la negativa de Trump de responder al llamado de miembros del Congreso, partidos y gobierno de detener el asalto al Capitolio. El enfrentamiento entre la policía y los manifestantes terminó con 5 muertes, 14 policías heridos y 52 arrestos. Derivado del alcance de los acontecimientos y de la evidente influencia de los mensajes del Presidente Trump, principalmente a través de las redes sociales, llevó a que Twitter primero eliminara 3 mensajes de Trump y el día viernes 8 suspendiera su cuenta permanentemente debido “al riesgo de una mayor incitación a la violencia”, de igual manera Mark Zuckerberg mencionó que “los riesgos de permitir que el presidente [Trump] continúe utilizando nuestro servicio durante este periodo, son demasiado grandes” y suspendió de manera indefinida sus cuentas de Facebook e Instagram. Por lo que, en esta ocasión fueron las redes sociales, y no gobiernos y organismos internacionales, quienes impusieron un límite a la libertad de expresión. La libertad de expresión es un derecho fundamental del ser humano que brinda la posibilidad de buscar, recibir y difundir opiniones, pensamientos e ideas. Sin embargo, la historia nos ha mostrado las consecuencias devastadoras del uso de dicha libertad por personas en el poder, al manipular la opinión pública a través de verdades a medias o mentiras. Lo anterior llevando, en casos extremos, a una reacción ciega y violenta de los seguidores para defender la estancia de su líder en el poder, o de “justificadamente” violar los Derechos Humanos de los “enemigos”. Si bien la libertad de expresión es un derecho que no se cuestiona, en el ámbito de los líderes demanda un escrutinio adicional, en tanto que queda manifiesta su responsabilidad en el uso de ese derecho, ya que cuando las palabras vienen de ellos, no son irrelevantes o insignificantes, las burlas, ofensas y ataques no son inofensivos. Por lo contrario, como ya se vivió en Estados Unidos, un discurso incendiario, puede generar un incendio. En las palabras de Kamala Harris, vicepresidenta electa de EUA “las palabras de un presidente importan”. Twitter: @Noemihrb