Vínculo copiado
#ESNOTICIA
#ESNOTICIA
Ya no es una suposición. El Presidente de México Andrés Manuel López Obrador busca lastimar intereses de empresarios del país, al costo que sea necesario. La forma, es lo de menos
02:05 martes 19 mayo, 2020
ColaboradoresYa no es una suposición. El Presidente de México Andrés Manuel López Obrador busca lastimar intereses de empresarios del país, al costo que sea necesario. La forma, es lo de menos. Como candidato, y durante toda su vida política, el hoy mandatario dejó claro siempre su pensamiento respecto de cómo se debe gobernar un país. Sus ideas arcaicas sobre el manejo de la economía y, sobre todo, su omisión por aprovechar avances de países de primer mundo, son solo algunas razones por las cuales se ganó el rechazo sistemático de empresarios y un recelo de quienes creemos diferente. Cuando gobernó la Ciudad de México, sin embargo, dio muestras de ser un gobernante, por lo menos, funcional. ¿Entonces qué fue lo que pasó entre que fue gobernante de la Ciudad de México y Presidente?. ¿Qué lo llevó a este momento donde se empeña en ser lo más disfuncional posible?. ¿Acaso es un gran coraje y resentimiento acumulado contra algunos empresarios que se aliaron con sus adversarios políticos para impedir, en dos ocasiones, llegar a ser Presidente?. ¿Vale más el resentimiento de un hombre que la salud política y económica de un país?. ¿Está por encima un gran coraje, de un hombre, sobre el futuro de 100 millones de personas?. Al principio de su gobierno, luego de varias decisiones que son una perla a la irresponsabilidad, como la cancelación del Aeropuerto de Texcoco, hubo margen para creer que eran decisiones, aunque absurdas, justificadas, pues lo había prometido en campaña. La forma, sin embargo, fue autoritaria y ridícula, apoyada en una consulta patito que armó para construir una razón. Los siguientes días y meses, nos han mostrado que la intención era destruir todas, pero todas, las instituciones que hemos construido en los últimos 30 años, aún las más eficaces, aún las más democráticas, aún las más nobles. Intentando ponerme de su lado y tratar de justificar la destrucción en marcha, nada es suficiente, nada alcanza para validar la sinrazón. Nunca como hoy, en horas definitivas, la frase política de que López Obrador es “Un peligro para México”, es real, actual y válida.