Luego de que el Instituto Nacional Electoral (INE), intentara bajar la candidatura de Mónica Rangel de Morena, por la anticipación de actos campaña y que ahora le merecerá una multa para el partido; en buena parte es responsabilidad de su dirigente nacional Mario Delgado, pues se ha visto un desapego por seguir las instituciones y en efecto el escenario que están viviendo los candidatos morenistas por las gubernaturas, están siendo afectadas por las decisiones que tomó el propio Delgado; así lo consideran la periodista, Adriana Ochoa y el analista político, Israel López. Durante la mesa de análisis político, indicaron qué, el propio Mario Delgado es el símbolo de un desastre que estuvo a punto de causar la caída de su abanderada en San Luis Potosí, pues sostuvieron que como dirigente nacional morenista era su responsabilidad el realizar campañas junto con sus candidatos, apegados a la ley y sin poner en riesgo la legitimidad de sus perfilados, aseveró Israel López. Por su parte la columnista Adriana Ochoa, destacó que Morena hoy por hoy no tiene una estructura como partido, que carece de una figura de líder con Mario Delgado… quien se ha mostrado como un dirigente que no le importa seguir las reglas y por ello están bajando a sus candidatos, porque no tiene una profesionalización de sus criterios para la definición de las candidaturas.