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Atraso en la obra puede causar imperfecciones, riesgos administrativos y temas legales
00:25 jueves 20 mayo, 2021
San LuisLa obra del puente que conectará el bulevar Antonio Rocha Cordero con la carretera 57, tiene al menos 40 por ciento de atraso y lo restante no tendría por qué rebasar un periodo de máximo tres meses, coincidieron especialistas en ingeniería y edificación de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP). De acuerdo con los especialistas consultados por este medio, la construcción es considerada sencilla, por lo que el tiempo promedio para concluir una obra de este tipo en México es de seis meses aproximadamente, contando con el flujo correspondiente de recursos y resuelto el tema de las licitaciones. En otras partes del mundo, un puente vías cruzadas como el que se está
construyendo, que implica partes elevadas y otras que requieren excavaciones toma no más de tres meses debido a la organización de sus procesos administrativos y la tecnología de construcción, refirieron. En el caso de este puente en el periférico oriente, ha tomado un total de catorce meses y sigue inconclusa. En primera instancia había una promesa de entrega para diciembre del 2020, ya que la construcción dio comienzo en marzo de ese año. Tras diversas complicaciones aparentemente presupuestales, se dio un aplazamiento al mes de abril, pero también se incumplió. Especialistas aseguran que el resto de la obra no debería de tomar más de tres meses, sin embargo, en febrero de este año se documentó que de la zona de construcción fueron retirados tanto el personal como la maquinaria. Apenas hace unas semanas un grupo de trabajadores se encuentra en el lugar realizando faenas menores, en tanto que otra zona prácticamente se convirtió en el estacionamiento para empleados de los diferentes establecimientos que se ubican cerca del incompleto puente. A decir de los expertos, el que se realice una obra con pausas de este tipo implica riesgos y fallas en su estructura, no al punto de que colapse, pero si en los acabados. Además de que al incorporar tramos debe haber una asociación de materiales, lo que implica un aumento de costos. En este sentido, los atrasos en una obra, asegura, pueden implicar además riesgos administrativos con respecto a las fianzas que las empresas participantes firman al hacer este tipo de obras y puede llevar también a temas legales por el incumplimiento de plazos y contrato por alguna de las partes. A cuentagotas avanza La obra que debía ser entregada a la ciudadanía en diciembre de 2020 aun presenta un considerable retraso, pues faltan fragmentos al puente y cimientos en otros puntos, esto sin considerar otros aspectos como la señalización y las incorporaciones a carriles del periférico. Si bien en el lugar se ven trabajadores que laboran en las columnas de una zona, no se percibe maquinaria o gran movimiento que dé aliento a la ciudadanía de que pronto se va a concluir el proyecto de infraestructura, y que diariamente transita por la zona y se ve afectada por el retraso.