El presidente Andrés Manuel López Obrador declaró este sábado que la decisión de cambiar el semáforo epidemiológico de la Ciudad de México a color rojo fue para evitar que los casos de Covid-19 superen la capacidad de atención de enfermos.  “Se tuvo que decidir, por los médicos, declarar en semáforo rojo la Ciudad de México por el número de contagios y para evitar que nos rebasara la pandemia y no se contara con camas, equipos, y médicos suficientes para atender enfermos. Por eso los encargados del sector salud recomendaron poner en rojo el semáforo en la Ciudad de México”, señaló López Obrador en conferencia de prensa desde Yucatán. El mandatario señaló que el aumento en el ritmo de contagios no ocurre en todo el país. Afirmó que sólo es en ocho de las 32 entidades federativas, entre ellas el Estado de México. “En el resto de los estados, la mayoría, está la pandemia controlada, como es el caso de Quintana Roo, el caso de Yucatán y Campeche, que está en verde”, dijo López Obrador. En el evento de supervisión de obras del Tren Maya, López Obrador señaló que el gobierno no puede dedicarse “sólo a la pandemia”, por lo que defendió una respuesta “equilibrada” entre la salud y la economía el país. “Se tiene que equilibrar la acción en lo sanitario, es decir, el enfrentar la pandemia como se ha venido haciendo y también reactivar nuestra economía. No podemos solo dedicarnos a atender la pandemia, a cerrar la actividad económica por completo en el país porque sería muy grave”, comentó. Las declaraciones de López Obrador, en un evento público en Halachó, Yucatán, ocurren cuando México ha superado los 1.3 millones de casos y las 117 mil muertes por Covid-19, de acuerdo con el último reporte de las autoridades sanitarias.  Como consecuencia, la Ciudad de México y el Estado de México pasaron ayer a semáforo rojo, lo que implica el cierre de las actividades no esenciales hasta el 10 de enero del 2021.

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Con información e imagen: Latinus