Saúl Álvarez tiene claro una cosa: busca asegurar su futuro y el de las próximas generaciones de su familia. Y el discurso del Canelo en los últimos meses de estar en una posición de privilegio de escoger a sus rivales, no es más que la justificación clara de: ¿Quieren que pelee?, sueltan el billete. Tal como lo hizo con David Benavidez a quien le pidió 200 millones de dólares para subirse al ring con él. Ahora, ante la petición de la Federación Internacional de Boxeo (FIB) para que llegue a un acuerdo con el boxeador cubano William Scull, quien es el retador obligatorio del organismo, el pugilista mexicano volvió con la misma charla. Me comentó Eddy Reynoso algo, pero pues he estado ocupado con lo de mi bebida de VMC, con lo del torneo de golf, no hemos profundizado sobre ese tema. Lo voy a hablar con mi equipo, estoy en una posición que, como le he dicho, puedo hacer lo que quiera. La verdad es que si me los dan (dinero), mañana mismo peleo”, declaró el tapatío en la tercera edición de su torneo No golf, no Life celebrado en el Club Bosque Real. Y ante una posibilidad de un combate ante Terence Crawford en Arabia Saudita, Álvarez dejó claro que es un proyecto tentador, pero deberán poner mucho dinero.   Es un gran peleador. Yo nací para pelear y aquí estoy para pelear con quien sea. Obviamente con los términos que me convengan más. Si quieren que vaya para allá, pues sí les va a costar un poquito más”. EL GOLF, SU NUEVA PASIÓN El Canelo ha sido uno de los cientos de deportistas que ha sido cautivado por el golf, un deporte que lo mantiene “humilde” y alejado de la tensión. Es un deporte muy competitivo, muy retador para ti mismo. Te da mucha humildad y te baja tu ego. Un día dices ya lo tengo y al siguiente día haces un desmadre. Creo que es un deporte muy bonito porque por lo mismo que te baja tus egos, te baña de humildad porque así es el deporte y aparte dejas cinco horas el teléfono”, manifestó. FUENTE: EXCELSIOR