La Casa Blanca advirtió a China que podría encarar aranceles “de hasta el 245%” debido a sus represalias a Estados Unidos en la guerra comercial iniciada por el presidente Donald Trump, según un comunicado. "China ha observado que algunas de sus exportaciones están ahora sujetas a un arancel de hasta el 245% bajo diversos pretextos. Esto expone descaradamente cómo Estados Unidos ha instrumentalizado y utilizado los aranceles con total irracionalidad”, señaló un portavoz del Ministerio de Comercio. La misiva fue firmada luego de que Donald Trump ordenó una investigación sobre los efectos en “la seguridad nacional” de la importación de minerales críticos y de “productos derivados” como los teléfonos inteligentes, los autos eléctricos o las baterías. La oficina presidencial destacó que más de 75 países se han puesto en contacto para negociar nuevos acuerdos comerciales, por lo que los aranceles más altos individualizados se han pausado, pero no así para China. Tras el último intercambio de subidas de aranceles entre ambas superpotencias, China elevó desde el 84% al 125% la tarifa adicional aplicada sobre las mercancías estadunidenses importadas. Trump lanzó una batalla arancelaria contra aliados y rivales desde el pasado 2 de abril en la que China se llevó la peor parte, con tarifas adicionales del 145% para sus productos exportados a Estados Unidos. China instó ayer a Estados Unidos a “dejar de amenazar y chantajear” después de que la Casa Blanca le trasladara la responsabilidad de iniciar una negociación para desescalar la guerra comercial entre las dos grandes economías mundiales. "China no desea luchar, pero no tiene miedo de hacerlo”, reiteró ayer Lin Jian, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores. "Si Estados Unidos realmente quiere resolver el asunto mediante el diálogo y la negociación, debería dejar de ejercer presión extrema, dejar de amenazar y chantajear, y hablar con China sobre la base de la igualdad, el respeto y el beneficio mutuo”, argumentó Lin Jian. DESTACA PROGRESO CON JAPÓN

Donald Trump aplaudió ayer el “progreso importante” con una delegación de Japón que viajó a Washington para negociar sobre aranceles a raíz de la actual guerra comercial.  "Es un gran honor haberme reunido con la delegación japonesa sobre comercio”, publicó en su red Truth Social. La delegación incluye al ministro de Revitalización Económica de Japón, Ryosei Akazawa, quien supuestamente debía reunirse sólo con el secretario del Tesoro estadunidense, Scott Bessent, y el representante comercial, Jamieson Greer, pero Trump se sumó a ellos. Japón, un aliado de EU y su mayor fuente de inversión extranjera, está en el punto de mira por recargos aduaneros del 25% sobre automóviles, acero y aluminio. El país nipón no se libró del impuesto mínimo universal del 10%. Después de Japón, se espera la llegada a Washington de delegaciones de Corea del Sur e Indonesia. Con información de Excélsior.