De acuerdo con Fernanda Zenizo, de Intelab, la gestión del capital humano para prevenir afectaciones al negocio sigue necesitando atención constante.  En el caso de las personas de 18 a 29 años, en un análisis realizado en un universo de 118 mil personas, se identificó que constituyen el conjunto de menor riesgo de integridad y de delito laboral para las empresas, lo que aumenta sus posibilidades de ser contratados con respecto a otros grupos de mayor edad ya que, por tener menos presiones familiares y económicas tienen más respeto a las normas y a la autoridad, un bajo abuso de sustancias y no se involucran en casos de ilícitos de las empresas.  El análisis agrega que, aunque no más elevados respecto a otras edades, los riesgos de conducta que hacen a los jóvenes no elegibles por las empresas tienen la tendencia a dejarse manipular, hacer mal manejo de la información confidencial, la falta de autodominio en situaciones de crisis, entre otros, por ello, requieren un monitoreo constante de los encargados del recurso humano en las organizaciones.

UNICORNIO EN DUDA

En diciembre de 2021, Incode, que comanda Ricardo Amper, alcanzó la valoración de mil millones de dólares. Por ese rápido crecimiento ha llamado la atención que la empresa ofrezca los servicios de verificación de identidad a partir del padrón de biométricos faciales del Instituto Nacional Electoral (INE), al mando de Lorenzo Córdova, a pesar de que la autoridad electoral no ha resuelto el procedimiento que permitiría compartir estos datos con privados. Expertos afirman que este hecho representa una sólo puede contar con acceso a la información dactilar de los mexicanos, dejando los llamados biométricos faciales fuera de su ámbito de acción. Será importante que Incode pueda despejar las dudas al respecto, sobre todo para mantener la confianza de algunos de sus clientes como Citi y Banorte. ¿PAUSA?

Los dichos del presidente Andrés Manuel López Obrador sobre pausar la relación entre México y España no encuentran mucho sustento. Un ejemplo lo tenemos en la construcción del Tren Maya donde consorcios españoles y mexicanos llevan a cabo diversas etapas del proyecto. POR JAIME NÚÑEZ

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