El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, de 79 años, fue diagnosticado este lunes con laberintitis, una inflamación del oído interno que le provocó un cuadro de vértigo. Según un boletín médico del Hospital Sirio-Libanés de Brasilia, al mandatario se le practicaron exámenes de sangre e imagen, cuyos resultados fueron normales, por lo que fue dado de alta y se encuentra en reposo en su residencia oficial. El equipo médico recomendó descanso durante el resto del día, motivo por el cual Lula canceló parte de su agenda oficial. Una fuente de la Presidencia, citada por AFP bajo condición de anonimato, confirmó que el presidente se sintió indispuesto en la mañana y fue atendido rápidamente por su equipo de salud. Este episodio se suma a una serie de complicaciones médicas que ha enfrentado Lula en los últimos años. A finales de 2024, fue operado de urgencia para drenar un hematoma intracraneano tras una caída en el baño de la residencia presidencial. En 2023 se sometió a una operación de cadera, y en 2011 fue tratado por un cáncer de laringe. Desde su regreso al poder en enero de 2023, Lula ha mantenido una intensa agenda de trabajo, incluyendo giras internacionales a Asia y Europa. Sin embargo, la reciente recaída ha reavivado interrogantes sobre su estado de salud y la posibilidad de que busque la reelección en 2026, opción que él mismo no ha descartado. Situación de Jair Bolsonaro

Su principal adversario político, el expresidente Jair Bolsonaro, también enfrenta problemas de salud. En abril se sometió a una cirugía abdominal relacionada con la puñalada que sufrió en 2018. Aunque enfrenta inhabilitación política y un juicio en la Corte Suprema, Bolsonaro ha reiterado su intención de postularse en las próximas presidenciales. Además de sus problemas médicos, Bolsonaro enfrenta más de 16 procesos judiciales en el Supremo Tribunal Federal, incluyendo investigaciones por supuesta incitación al golpe tras las elecciones de 2022 y por uso indebido de datos confidenciales. Su inhabilitación política, decretada por el Tribunal Superior Electoral en junio de 2023, se mantendrá hasta 2030, salvo que prospere alguno de los recursos legales en curso. Impacto de la laberintitis y perspectivas políticas

La laberintitis es una afección que puede afectar el equilibrio y la audición, y en personas de edad avanzada como el presidente Lula da Silva, puede representar un riesgo considerable, especialmente si se combina con antecedentes de caídas como la ocurrida en 2024. Esta inflamación suele tener origen viral o bacteriano y, aunque en muchos casos es tratable con reposo y medicación, puede ser debilitante temporalmente. Según datos del Ministerio da Saúde de Brasil, las hospitalizaciones por afecciones vestibulares (como la laberintitis) en adultos mayores han aumentado un 15% en la última década, en parte debido al envejecimiento poblacional y el incremento de diagnósticos. En lo que respecta a su posible candidatura en 2026, encuestas recientes como la de Datafolha (mayo de 2025) indican que el 36% de los brasileños apoyaría una reelección de Lula, mientras que un 41% se muestra en contra. El desgaste físico y la salud serán factores claves en su decisión, aunque el mandatario ha señalado que su participación dependerá del contexto político y del respaldo del Partido de los Trabajadores (PT). Con información de Excélsior