Debido a la pandemia, empresas y familias que anteriormente apoyaban con donativos a organizaciones de la sociedad civil, hoy han dejado de hacerlo, lo que pone en serió peligro de que desaparezcan algunas de estas agrupaciones benefactoras. Al respecto habló Alejandra Cornejo, integrante del Patronato de la Casa Hogar Máximo Cornejo, organismo que ha visto drásticamente mermadas las donaciones que hasta antes de la pandemia recibían de empresas y familias vallartenses. “Familias que cada mes están llevándonos despensa, artículos de limpieza y lo básico para poder seguir operando, de pronto se ha visto una disminución, si, al igual que todos los negocios durante la pandemia, pues hubo un ingreso menos de donativos y de los medios para poder seguir adelante”. Ante la carencia de recursos, señaló la entrevista han tenido que hacer uso del ingenio para poder alimentar a los 23 niños de entre 0 y 18 años, que actualmente se encuentran albergados en el lugar. “Lo hemos hecho pues ahora sí que utilizando nuestras reservas y lo que teníamos de pronto ahí ahorrado y todas las reservas de alimentos y sobretodo calzado, vestido, pues vamos ahí subsistiendo, sin embargo, pues ahí también una carencia, una necesidad para poder, mientras que no haya visitas y mientras que todas estas restricciones que impiden que de pronto haya eventos de recaudación u otro medios para hacernos recursos, pues vemos con dificultad que podemos cubrir lo más básico”. Dijo que si bien es cierto pueden seguir operando, en este momento se encuentran en una situación “limitada”.