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El carismático manager llegó a los Astros como apagafuegos, luego del escándalo por el robo de señales que se destapó en 2020
20:03 domingo 13 noviembre, 2022
Deporte Nacional e InternacionalEsta es mi última oportunidad de completar el reto”, expresó Dusty Baker sobre el deseo de ganar su primera Serie Mundial al ser presentado como manager de los Astros de Houston en el invierno de 2020. El carismático piloto llegaba con la encomienda de apagar el fuego luego del escándalo del equipo texano por el robo de señales en la temporada de 2017, en la que fueron campeones y por años el equipo más odiado. Baker, el manager 22 en la historia de los Astros, no tardó en ganarse la admiración y respeto de los jugadores gracias al trato cercano, lo que de inmediato le dio resultados exitosos hasta que en su segundo Clásico de Otoño en tres temporadas con el equipo se convirtió en el estratega de mayor edad (73 años) en levantar el título en su campaña 25. El californiano, con su clásico palillo que baila entre su labios y sus característicos guantes negros que comenzó a usar desde la pandemia, se dio el tiempo de anotar la última jugada en su libreta, antes de comenzar con los festejos después de que cayó el out que le dio el segundo título en su historia a los Astros. Ya en el centro del diamante, y con el trofeo de campeones en lo alto, invitó a sus jugadores a dar el siguiente paso. Este es el grupo más increíble que he tenido. Ellos me dijeron en el Spring Training que íbamos a ganar y aquí estamos. ¿Ahora qué sigue? Nos vamos de fiesta”, agregó Baker. MANEJA DIFERENTES CULTURAS El roster de 26 elementos con el que Astros de Houston se coronó sobre Filis de Filadelfia en la pasada Serie Mundial, contaba con 15 latinos, lo que marcó un récord. Baker, en sus inicios como pelotero, antes de establecerse en la Gran Carpa, vio acción en las ligas invernales de Puerto Rico, Venezuela y México. Esto le ayudó para conocer diferentes culturas e incluso el idioma español, lo que le fue de gran ayuda en este equipo en el que pudo tener un acercamiento directo con los jugadores. En 1971 participó con los Yaquis de Ciudad Obregón en la Liga Mexicana del Pacífico y estuvo como jardinero central en el juego perfecto que lanzó Vicente El Huevo Romo, el primero que se presentó en la historia del circuito. Recién llegado a los Astros, no dejó de sorprender con acciones a sus jugadores. En una ocasión, el mexicano José Urquidy se encontró con un apetitoso plato de pozole al llegar a su casillero, una cortesía de su manager, quien dijo sobre su lanzador: “Entonces estará fuerte mañana”. Urquidy no dudó en saborear el tradicional platillo mexicano. Es un gran gesto y es una parte muy importante de la buena relación que tenemos con él”. Conocido por esos vínculos con los jugadores en su trayectoria como manager, fue una de las razones por las que el dueño de los Astros, Jim Crane, no dudó en que era la persona ideal para tratar de levantar a un equipo golpeado por el escándalo. Baker ya había ganado una Serie Mundial como jugador al ser el jardinero izquierdo de los Dodgers en la edición de 1981 en la que se impusieron a Yankees. Como manager había tenido su primera oportunidad justo hace 20 años, al frente de los Gigantes y el jonronero Barry Bonds, pero cayeron en siete juegos ante Angelinos de Los Ángeles. En su segunda temporada con los Astros, la de 2021, llegó hasta la Serie Mundial, pero perdió ante los Bravos de Atlanta. En su casa, los jugadores de Houston vieron a lo lejos el festejo del equipo de la Liga Nacional. Baker los motivó con sus palabras: “El próximo año vamos a regresar aquí y entonces tendremos nuestra revancha”. Astros de Houston fue el equipo con el mejor récord en la Liga Americana al ganar 106 encuentros por 56 derrotas. En la postemporada barrieron a Marineros y Yankees. Y aunque dejaron escapar una ventaja de cinco carreras en el primer juego de la Serie Mundial, al final Dusty Baker pudo sonreír e incluso presumir unos pasos de baile, acompañado de un burbujeante champagne. FUENTE: EXCELSIOR