Marcelo Ebrard calificó como positiva la reunión que sostuvo con unos 30 legisladores afines al líder de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados, Ignacio Mier. En un desayuno, Ebrard comentó que los legisladores expusieron las presiones de las que han sido objeto por parte de las dirigencias tanto de Morena como del Partido Verde y el del Trabajo para debilitar la reciente asociación civil que busca impulsar al excanciller. “No tiene sentido, no tiene caso el esfuerzo por hacerlos cambiar de opinión o tratar de someterlos, es un error estratégico, más bien lo que hay que hacer es reconocer la diversidad que existía y sigue existiendo, que se les dé un trato como el que merecen”, dijo. Sobre su futuro en Morena, el ex jefe de Gobierno de la Ciudad de México dijo que la tardanza en la respuesta a sus impugnaciones por parte de la Comisión de Honestidad y Justicia ha provocado especulaciones y señaló que genera desconfianza en los procesos internos del partido. “Estamos esperando la respuesta de Morena a la impugnación que se hizo, que marca irregularidades importantes, que nos preocupan muchísimo porque se van a reproducir en todas las encuestas que vienen, que se harán cientos de encuestas con lo mismo”, sostuvo. Por su parte, Ignacio Mier negó que se haya presionado a los legisladores que simpatizan con Ebrard y que su papel es mantener unido al grupo parlamentario, pero reconoció que hay diferencias. “En el caso de nosotros no ha sido así, en el caso de Morena, respetamos. Así nacimos, nacimos en el debate, la discusión, la discrepancia, pero siempre con lealtad a lo que defendemos, a nuestros valores, a nuestros principios y eso no ha cambiado”, afirmó el dirigente. --

Con información de Latinus