El ecosistema económico en México cierra con cosas buenas y malas; por un lado, se ve como elemento positivo que el Gobierno se prepara para la revisión del T-MEC en 2026, así como el desempeño de la creación de empleos, el cual fue bueno, no tan alto, pero se distingue cierta mejora, señaló Ana Bertha Gutiérrez, coordinadora de Comercio Exterior y Mercado Laboral del IMCO

En este sentido, la necesidad de una política industrial se vuelve imperiosa para volver a México más fuerte en temas de competitividad y así incrementar las posibilidades de unir a la nación a las cadenas más productivas de América del Norte, afirmó la coordinadora, quien también aseguró que una oportunidad de crecimiento es la oportunidad de aumentar el valor agregado a las exportaciones, es decir, aquellas en las que el valor realmente es calculado con los productos y trabajadores locales.

En consecuencia, el IMCO -puntualizó Ana Bertha Gutiérrez- impulsa una política industrial dado que el porcentaje del valor agregado está estancado. No obstante, reconoció que México ha hecho bien en implementar una política de apertura comercial desde hace años, lo que ha permitido ser una potencia industrial y ser el octavo exportador a nivel mundial -el cuarto en el sector automotriz-.

“Esta política ha permitido que la industria crezca, lo que falta y queremos es ese cambio geopolítico para que esta apertura vaya de la mano con una política industrial que fortalezca el sector productivo y así incentivar la participación de proveedores nacionales, que sean más grandes, más resilientes y que tengan una durabilidad más larga”, agregó. Esto, si lo que se desea es hacerle frente a Asia e incrementar el valor agregado a exportaciones; un tema que requiere una visión más amplia y no solo concentrarse en incrementar tecnología o semiconductores.

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Asimismo, se busca que más Mipymes se consoliden en el ecosistema económica, para ello, asegura Gutiérrez, se requiere la simbiosis de una buena cantidad de factores: digitalización, capacitación de capital humano, acceso a financiamiento, nuevas tecnologías, impulso a investigación, desarrollo científico, infraestructura de logística, sostenibilidad, estado de derecho y política comercial. Todo tiene que “ir de la mano”, añadió.