El GGG Racing Team, en conjunto con ProRally, cerró una temporada llena de emociones durante la “Puebla 110, La Gran Final”, disputada en el Autódromo Miguel E. Abed. La última carrera del año, pactada a 110 vueltas, se vio marcada por múltiples banderas amarillas que, debido a su frecuencia, llevaron a que la competencia concluyera por tiempo, agregando un nivel adicional de incertidumbre y exigencia para todos los pilotos, incluido Rodrigo Rejón y el auto #95. Para esta gran final, Rodrigo presentó un diseño especial y retro inspirado en el legendario auto 95, un homenaje visual que destacó durante toda la jornada y que resonó con la afición. A pesar de no estar en la fase de playoffs, el piloto mantuvo el espíritu competitivo que lo caracteriza, mostrando ritmo constante y una actitud firme para cerrar la temporada entre los mejores. Tras haber conseguido un top 10 en Aguascalientes, Rodrigo llegó a Puebla decidido a ofrecer un espectáculo digno de una final. Cada curva, cada batalla rueda a rueda y cada estrategia dentro de pits reflejaron el compromiso del equipo y la evolución deportiva de una temporada que consolidó al auto #95 como un protagonista visual y competitivo dentro del serial. La sinergia con ProRally fue clave para mantener un rendimiento sólido en un año lleno de cambios, retos técnicos y aprendizajes que fortalecen el camino hacia la próxima temporada. Con el cierre de esta gran final, comienza un nuevo capítulo. La temporada 2026 se acerca, y el #95 llega con hambre, energía y la certeza de que el rayo no cae dos veces en el mismo lugar… pero cuando lo hace, deja huella.