La jornada electoral del pasado domingo donde se eligieron 6 gubernaturas del país, trajo un nuevo acomodo de la geografía política de México. Los estados de Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas eligieron Gobernante para los próximos 6 años, entre ellos solo Aguascalientes y Durango mantienen el partido en el Poder, el resto presenta alternancia, siendo la mayoría triunfos de Morena 4 de 6, el partido del Presidente López Obrador. La alternancia llega a 4 de los 6 Estados siendo Hidalgo el más representativo, pues el PRI Gobernó durante 93 años y ahora entrega a Morena la estafeta. Los números quedan así: Morena Gobierna en 20 entidades, el PAN en 6, el PRI en 3, mientras que Movimiento Ciudadano gobierna en 2, el Partido Verde en 1 y Encuentro Social en 1. El PRI practicante se encuentra en “caída libre” mientas en 2015 ostentaba el Gobierno en 19 Estados del País, hoy solo lo hace en 3. La idea de re evolucionar a este instituto político, incluso con un cambio drástico de 360 grados con un nuevo nombre e imagen no estaba descabellada, hoy su descredito y el abandono de sus cuadros y seguidores es absoluto. Por otro lado, el PAN, quien más perdió con las recientes alianzas, también se encuentra en una posición complicada, su Presidente Nacional sin peso moral, no ha sabido llevar las riendas de su camino, prácticamente la ausencia de liderazgos como este caso, se presenta en todos los partidos de oposición. El PRD prácticamente está “intubado” a las alianzas con el PAN y PRI, pues en algunos Estados del país ya ni siquiera cuenta con registro, su imagen se desvaneció en unos pocos años a partir del rompimiento con el Presiente López Obrador, llegando al nivel que algunos de sus miembros hoy son “perseguidos políticos”. Por otro lado, el andar de Movimiento Ciudadano se detuvo abruptamente en esta elección, por las malas decisiones de su dirigencia nacional, que le pasan factura en los 6 Estados en donde aspiraba a repetir la proeza de Jalisco y Nuevo León, dejar entrar a cualquiera le resto y en San Luis Potosí aun vienen peores decisiones. Los que ganan sin duda además de Morena, son el Verde y el PT aliados que le dan fuerza para repetir al menos otros 6 años esta receta de éxito. El próximo año será determinante, pues la elección del Estado de México será el fiel de la balanza, para la sucesión del 2024, donde Morena ya acelera el paso, no es ajeno el alto interés del Presidente en los temas políticos, de los que habla todos los días en las mañaneras, sin cambiar el tema ni cambiar de opinión, pues nunca bajo la guardia para convertirse en el Presidente de todos, su discurso de división es prácticamente bandera electoral. Este round lo gana Morena y si definitivamente habrá tiro en el 2024, pero por la falta de liderazgos en la oposición y falta de perfiles con capacidad y arrastre, tal vez sea “tiro de gracia”

.

Hagamos juntos la Diferencia

Jorge Armendáriz Gallardo

[email protected]