La próxima llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos ha logrado destrabar, como efecto secundario, un tema muy importante que estaba atrapado en las burocracias europeas: la posible modernización del acuerdo de libre comercio entre México y la Unión Europea.  Ese tratado, vigente desde el 2000 pero que sufrió una fuerte revisión y renegociación a finales del sexenio de Enrique Peña Nieto, –quien lo anunció en la feria industrial alemana Hannover Messe junto con Angela Merkel, la ex Canciller– está listo. Pero en el sexenio de Andrés Manuel López Obrador este tratado fue guardado en el cajón para ser mencionado escasamente. Hasta ahora, que a los europeos les entró la prisa, particularmente a los alemanes. La malograda visita de Olaf Scholz hace un par de semanas a México habría de detonar la que podría ser la etapa final para la renovación del acuerdo. No obstante, la crisis alemana –política e industrial–, ha puesto una piedra en el camino. Pero la llegada inminente de Trump a la Casa Blanca está acelerando las cosas. Los documentos oficiales europeos hablan de que este tratado actualizado “eliminaría muchos de los aranceles aduaneros del comercio bilateral entre la Unión Europea y México.  En el sector agroindustrial, más del 85 por ciento de las clasificaciones arancelarias se liberalizarían por completo […y…] protegería 340 indicaciones geográficas europeas en México. Además, incluye capítulos respecto de reglas de origen (automóviles incluidos), facilitación del comercio, salvaguardas técnicas, barreras técnicas al comercio, así como reglas sanitarias…” Hay muchas empresas alemanas que están esperando con ansia este acuerdo. Oechsler México, dirigida por Daniel Kilian, hizo recientemente declaraciones al respecto. Pero son varias. Bosch, por ejemplo, ha estado aumentando la proveeduría local mexicana para ser funcionar en el T-MEC pero también con Europa, dado que en el Viejo Continente tampoco querrán autopartes chinas. Y, para beneficio nuestro, lo bueno es que la Secretaría de Economía de Marcelo Ebrard tiene también este acuerdo en la mira para una pronta concreción. Sí.  CHINOS Y TRENES

Corre el run run de que empresas chinas están fuertemente interesadas en fabricar los carros de ferrocarril (vagones) para varios de los tramos de nuevos trenes de pasajeros anunciados por la presidenta Claudia Sheinbaum la semana pasada, de México a Laredo, y de México a Nogales. Los costos de sus trenes serían muy competitivos. A ver…  

HUAWEI

La empresa de equipo de telecomunicaciones china que en México encabeza César Funes abrirá un área de negocio completa en nuestro país dedicada a industrias específicas: minería y puertos, principalmente. Habrá un equipo ex profeso dedicado a impulsar 5.5 G y otras tecnologías en esas industrias. POR: CARLOS MOTA