Como cada 6 de enero la comunidad de Zoquite en Guadalupe llevó a cabo su tradicional fiesta patronal,  en la cual conmemoran el Día de Reyes y veneran al Niño Dios monumental colocado en la iglesia principal del pueblo. Este año los festejos se vieron con poca afluencia debido a que los temas de seguridad influyeron para que llegarán menos visitantes, aun así los festejos no pararon. Desde las primeras horas se inició el tradicional desfile por la calles del pueblo, donde carros alegóricos con nacimientos vivientes, danzantes y tractores adornados vistieron las vialidades de un ambiente festivo y religioso.

José Luna, uno de los participantes de esta celebración señaló que tiene varios años participando por la devoción que tiene al Niño Dios, aseguró que desde hace tres años que fue colocada la figura monumental del santo, las visitas mejoraron, pero solo el primer año. Y es que la pandemia impidió llevar con normalidad las festividades en ediciones pasadas y este año el tema de la seguridad desmotivó la visita de más personas, considero don Juan. Aun así, durante el Día de Reyes, en el pueblo se vive un ambiente festivo, las familias salen a las calles a ver desfilar a las reinas de la fiesta patronal, sacan sus mejores prendas para acudir a la misa en honor al Niño Dios y por la tarde-noche acuden a los puestos y juegos colocados alrededor de la iglesia. Las bandas de música acuden a la iglesia, así como niños disfrazados de los reyes magos, de José y María y muchos acuden a bendecir a su propio Niño Dios.