Se estima que en San Luis Potosí, han cerrado sus puertas de manera definitiva, al menos 100 tienditas, esto debido a la inflación, lamentó Armando Reyes Sías, presidente local de la Cámara Nacional de Comercio en Pequeño (Canacope). El número de establecimientos de abarrotes cerrados, podría ser mayor, ya que “muchos” de los excomerciantes, no se han dado de baja del Servicio de Administración Tributaria (SAT), explicó. Los comerciantes ya no alcanzan a resurtir sus negocios por cuestiones económicas, las ventas son muy bajas y los productos tienen costos muy elevados: “eso nos está llevando prácticamente a la quiebra”. Reclamó que la Secretaría de Economía y la Procuraduría Federal del Consumidor, deberían regular los precios a los productos de la canasta básica, “pues no hay una dependencia que diga “ya párale”. Los altos precios, se deben a que los mismos gobiernos lo aceptan y están llevando a los comerciantes a la quiebra, reclamó. Ejemplificó que las barras de pan están en $50, mientras que un litro de aceite también se encuentra entre los $40 y $50, “los sueldos no soportan ya esos incrementos, la gente ya no puede comprar con los sueldos con tiene, no puede subsistir para la canasta básica, para comprar a la familia, nosotros comerciantes estamos en la quiebra, porque todos los productos se elevan y el capital ya no lo tenemos ni para surtir”.