Normalmente me paso de sospechosista, pero me consuela saber que otros están peor que yo. Por ejemplo, tras esa inesperada y poco común conferencia de prensa del hombre más rico de Latinoamérica, Carlos Slim, donde aceptó “tener diferencias” con mi Jaguar de Macuspana. Según el periodista Francisco Cruz, el empresario parecía estar mandando mensajes velados a cierto siniestro personaje, refiriéndose al chupacabras Salinas. El señor Slim aseguró que “no ha recibido ningún beneficio de este gobierno, en cambio él sí le ha dado mucho”. Y hasta se quejó de haber tenido poca chamba en obra pública, cuando en realidad logró licitación para el Tren Maya y el Interoceánico; se lavó las manos de los sucedido en la línea 12 y al final yo sólo me pregunto: ¿para qué mandarle mensajes encriptados al orejón, pudiendo enviarle un emoji vía WhatsApp? A nivel macroeconomía, la verdad es que en México estamos de fiesta. El turismo durante 2023, subió casi 29% con respecto al 2019, es decir el año previo a la pandemia. La Secretaría de Economía declaró que México ocupa el lugar número 12 en economía mundial. El Producto Interno Bruto aumentó el año pasado 3.29%. La recaudación fiscal, respecto al año anterior subió el 36%. La inversión extranjera directa fue 30% mayor. Somos el principal socio comercial de los Estados Unidos. La tasa de desempleo está en 2.6%, quiere decir que el país está creciendo. Hay distribución de la riqueza, hay disminución de la pobreza. En esta administración y con el aumento del salario mínimo y los programas sociales, la economía está regando desde abajo. Este fin de semana estará muy movido, aparte de la mega marcha convocada por el ex director del INE y patrocinada por “todos ya sabemos quién”, justo es el día en que se registrarán les candidates a la Presidencia de la República. Y ahora si agárrense, porque el 1 de marzo inicia la campaña de la compañera Sheinbaum en el Zócalo de la Ciudad de México. Ella le lleva una distancia de tres a uno a su más cercana competidora, quien después de realizar toda una serie de actos sin sentido durante su visita a Nueva York o España y hasta con artículos en diferentes periódicos internacionales, algo buscan. Otro sospechosista profesional, los PERIODISTAS se atreven a conjeturar, que esa postura de negación absoluta de la realidad, aunada a todo este paquete de supuesto apoyo internacional, es a lo que probablemente apelará la oposición terminando las elecciones para poder alegar algún inexistente fraude. Para variar los reaccionarios usurpando el discurso de la izquierda, queriendo hacernos creer que ellos son los defensores de la democracia. Sin embargo, debemos estar alerta porque una mentira muy repetida, tizna. Como esa del supuesto patrocinio a la campaña de AMLO en 2006, que aún sin prueba alguna, alcanzó 120 millones de reacciones en las redes sociales. ¿Qué tal? POR: FERNANDA TAPIA