El Bayern Múnich cumplió en el derbi bávaro contra el Augsburgo, al que derrotó 2-0 este domingo en la 25ª jornada de la Bundesliga, con lo que refuerza su liderato y resiste la presión del Borussia Dortmund, que es ahora su más directo perseguidor. Había comenzado la jornada con 3 puntos de ventaja sobre el segundo, que era el RB Leipzig, que no pasó del empate 0-0 el sábado en Wolfsburgo (7º) y que queda ahora en tercer lugar, a 5 unidades de los muniqueses. En su partido del Allianz Arena, al Bayern le costó en la primera parte, donde dio una mala imagen, pero decidió en la segunda mitad. El encargado de derribar el muro del Augsburgo (14º) fue Thomas Müller (minuto 53), que remató de volea desde la zona del punto de penal, cara a cara ante el arquero rival, tras recibir un pase en largo, desde el centro del campo, de su compañero Jerome Boateng. La sentencia definitiva no llegó hasta el descuento final (90+1), cuando Leon Goretzka culminó con un toque sutil en el área pequeña una triangulación en el área con su compañero Serge Gnabry. El Bayern encadena una sexta victoria seguida, teniendo en cuenta todas las competiciones, y en sus últimos cuatro compromisos no ha recibido ningún gol. Cierra una semana perfecta, en la que el martes había logrado su clasificación a semifinales de la Copa de Alemania, con una victoria 1 a 0 en Gelsenkirchen contra el Schalke 04.

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Excelsior