Vínculo copiado
La mexicana Alejandra Manríquez, fiel aficionada del Barcelona, recuerda el día que tripuló un avión con el portugués
01:54 domingo 14 junio, 2020
Deporte Nacional e InternacionalLa mexicana Alejandra Manríquez dejó volar sus sueños sin imaginar que la llevarían a juntar sus grandes pasiones: la aviación y el futbol. La piloto capitalina, fanática del Barcelona, conoció a Cristiano Ronaldo, entonces jugador del Real Madrid, y aprendió que la rivalidad sólo está en la cancha. Manríquez sufrió con una doble ausencia durante la actual pandemia del coronavirus: el no poder volar y tampoco ver futbol. Al menos el Barcelona entra hoy en acción en la Liga de España.
Desde que Rafa Márquez jugaba con ellos empecé a apasionarme por el equipo y ahora soy súper fan”, revela Alejandra. “Barcelona es mi ciudad favorita y cada que vuelo allá, por trabajo, busco la forma de acudir a un partido”, agrega.
Pero el encuentro que nunca esperó se dio en la cabina de un avión con Cristiano Ronaldo. El astro portugués, quien entonces jugaba con el Real Madrid, vacacionaba en Miami y tenía que reportar con el equipo español. Su jet particular presentó un problema y ante la urgencia de volar a Europa decidió contratar los servicios de una empresa privada, sin imaginar que entre la tripulación estaba una ferviente seguidora blaugrana.
Tuve la oportunidad de volar con él. A pesar de que soy fan del Barcelona, soy también fan del futbol y el poder platicar de mi pasión con alguien que lo vive y además es un símbolo ¡fue una experiencia increíble!
Tenía mis reservas cuando supe que íbamos volar con él porque pensé que era una persona complicada, pero me cambió totalmente cuando lo conocí. Se portó muy bien con la tripulación, nos invitó a cenar allá en Madrid y luego nos invitó a un partido”, recuerda con emoción sobre aquel encuentro con el portugués a principios de 2016.
La piloto mexicana en su encuentro con el portugués Cristiano Ronaldo
Con 10 años de trayectoria como piloto, los recuerdos que le ha dejado su gran pasión son invaluables. Son más de 40 países los que ha conocido y de cada uno de ellos se llevó una grata experiencia. Me han tocado volar por todas partes del mundo; he conocido diferentes culturas, personas y aeropuertos con reglamentación distinta”, cuenta la mexicana.
Su relación con el futbol no deja de estar presente cuando tiene que volar. Procuro ir siempre a los estadios cuando estamos en alguna ciudad como Londres o París. En donde estemos, en cada viaje nuevo, me gusta ir a un estadio de futbol ¡lo disfruto mucho!
Me tocó el Mundial de futbol de Brasil, estuvimos llevando mucha gente de México; luego quería ir para el Mundial Rusia, pero no se abrió ningún viaje, quizá por la distancia no hubo clientes para rentarnos. Lo tuve que seguir desde México”, recuerda sobre las experiencias mundialistas.
Aunque el futbol mexicano no lo sigue como el europeo, gracias a su trabajo también conoció a uno de los goleadores referentes de la Liga MX en los últimos años como lo es el francés André-Pierre Gignac, de los Tigres.
André Pierre-Gignac también ha sido trasladado por la capitalina
Gignac es una persona súper linda; dos o tres veces no tocó volar con él. El futbol mexicano no lo sigo mucho, antes era aficionada del Cruz Azul, pero ya después de tantas decepciones...me gustan más las ligas europeas por el nivel”, dice Manríquez, quien desde el pasado jueves que se reanudó la Liga de España estuvo al pendiente del partido entre Sevilla y Betis.
Su actividad la ha llevado a conocer a más deportistas destacados. Fue testigo de la seriedad del seis veces campeón de la F1, Lewis Hamilton, a quien en una ocasión les tocó llevarlo a Los Cabos. También en varios vuelos convivió con el mexicano Checo Pérez. Con Checo tuvimos contrato un buen tiempo. Es súper buena persona él y todo su equipo de trabajo. ¡Estuvo padrísimo!”.
Con el piloto tapatío Checo Pérez coincidió en varias ocasiones
Aunque no es aficionada de la NBA, recuerda que también le tocó volar con varias estrellas del basquetbol de los Estados Unidos. Ahí sí le tuve que preguntar a mi hermano por los nombres porque no sigo la NBA”.
Acostumbrada a la libertad de volar, son tiempos son complicados para Alejandra Manríquez. Por reglamentación los pilotos tenemos que seguir tomando cursos de actualización. Ahora los estamos haciendo en línea y duran como siete horas, debemos estar frescos en teoría. También debemos hacer simulador al menos una vez al año, a mí ya me tocó hacerlo.
Para mí no es un trabajo, es una pasión. Ahora estoy esperando el momento de regresar a volar”.
-- Excelsior