Este Domingo se llevó a cabo la tercera etapa y presentación de resultados del proyecto #YoPorMiCiudad en el jardín de Tequis, en donde se dieron a conocer los resultados respecto a la percepción de la ciudadanía sobre condiciones del espacio público en la capital, en materia de baches, infraestructura urbana, iluminación, banquetas, seguridad, inclusión, entre otros aspectos conseguidos a través de encuestas a la ciudadanía. Marcos Algara Siller, director de la Agenda Ambiental de la UASLP recordó que este proyecto en su primera etapa inicio con el #BacheChallenge donde un total de 60 personas en bicicleta circularon por la vía de la ciclovía de Himno Nacional, 2 semanas antes de que arrancara la obra de esta infraestructura, para detectar irregularidades y zonas problemáticas para los ciclistas, peatones y automovilistas. Declaró que en este ejercicio se detectaron problemáticas en esta vialidad como cables sueltos, baches, árboles y autos estacionados que tapaban visibilidad a los ciclistas. “A mí me impactó, a ver visto registros a nivel de piso y pared, a no más de un metro cincuenta, destapados, rotos, con cables de alta tensión, algunos pelones, que no estaban protegidos y que se notaba que era infraestructura que se había cuidado por lo menos meses o años, en Himno Nacional”. Indicó que, en su momento, se entregó esta información al Instituto Municipal de Planeación, sin embargo, ya no se tuvo una retroalimentación de estos datos por parte de las autoridades. En la siguiente etapa denominada #MueveTuBarrio, el cual se hizo en la colonia Modena, se sondeó a la población sobre las problemáticas de la zona, en esta encuesta el comentario más mencionado por los participantes fue el tráfico con un 17.8%, seguido de banquetas en mal estado, problemas de accesibilidad con un 8.9% y baches con un 8.9%. Los ciudadanos encuestados también mencionaron problemas de iluminación, peatones en peligro, rampas obstruidas y coches mal estacionados. Algara Siller señaló que en este proyecto se ha encuestado a más de mil 500 personas. El proyecto es impulsado por la Universidad Autónoma de San Luis Potosí a través de Agenda Ambiental en conjunto con el Instituto Potosino de Investigación Científica y Tecnológica (IPICYT), la organización Cambio de Ruta.