Representantes de organizaciones medioambientales demandaron a los tres candidatos a la Presidencia de México definir una ruta clara hacia la descarbonización y la transición energética, ya que alcanzar distintos objetivos climáticos internacionales estará en manos de la próxima Administración (2024-2030). “Tenemos que cambiar el sentido común y ver al sector ambiental no solo como una cuestión que proteger o prevenir su mayor deterioro, sino como una oportunidad de encender un motor verde para el desarrollo”, señaló el director ejecutivo de World Research Institute México (WRI, en inglés), José Luis Samaniego. En un conversatorio con representantes de la candidata Xóchitl Gálvez, de la coalición Frente Fuerza y Corazón por México, Samaniego planteó la urgencia de “combinar la idea de no seguir perdiendo ecosistemas”, junto con “ver la oportunidad de encender motores verdes” en la economía del país. Por lo que a nombre de una veintena de ONG, entregó al equipo de Gálvez un documento con “58 alternativas e instrumentos de política pública” y “12 oportunidades de acción”, que destacó, son en mayoría decisiones en poder del Ejecutivo, sin necesidad de pasar por debates parlamentarios. Entre estas oportunidades, señaló la propuesta de poner un costo social al carbono, a las hectáreas transformadas o a las especies perdidas. “Eso implica que al momento de las evaluaciones sociales de las inversiones del sector público, cambia la rentabilidad relativa en favor de las que destruyen menos y tienen más ventajas ambientales”, explicó. En cuanto a las metas climáticas de México, el director de la Iniciativa Climática de México, Adrián Fernández, destacó que México “es el único país del G20 que no ha publicado detalladamente las rutas de cuándo y cómo vamos a llegar a emisiones netas cero“. En ese sentido, remarcó la necesidad de “ser más ambiciosos” y cuadruplicar las energías renovables, o al menos, triplicarlas, además de que no haya más plantas nuevas de carbón. Por su parte, Anaid Velasco, del Grupo de Financiamiento Climático para Latinoamérica y el Caribe (GFLAC) enfatizó “lo importante que son estos siguientes 6 años”, debido a que los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU, además del “Marco mundial de Biodiversidad y también el Acuerdo de París, tienen fechas concretas al 2030”. Además, destacó que “México ha recibido 59 veces más ingresos por actividades intensivas de carbono que por cambio climático” y que, a su vez, “ha asignado 355 veces más presupuesto en proyectos y actividades intensivas en carbono que en la acción climática”. Finalmente, Emilio Cruz, de la Alianza Mexicana por la Restauración de los Ecosistemas, manifestó su “preocupación” de que Gálvez no haya asistido al conversatorio y haya enviado “a los que saben del tema”, quienes además de transmitirle las oportunidades en la materia, tendrán el reto, sin importar el resultado de la elección, “de incorporar este pacto que firmaron en las plataformas políticas de los partidos políticos que forman la alianza”. El ‘Pacto por una Revolución Sostenible‘ fue firmado por el candidato del opositor Movimiento Ciudadano, Jorge Álvarez Máynez, tras acudir al diálogo, al que se espera que este viernes acuda la candidata oficialista Claudia Sheinbaum, líder en la encuestas, quien junto con Gálvez, definirán el 2 de junio al próximo presidente o presidenta de México. Con información de López-Dóriga Digital.