Amazon creó una herramienta de aprendizaje automático que tiene como objetivo revisar currículums de empleo desde 2014, pero no todo ha salido como se esperaba.  Dicha inteligencia artificial es capaz de buscar nuevos talentos, pero no es capaz de ser neutral. Su motor de búsqueda era sexista y descartaba a las mujeres.  A veces la tecnología suele ser un aliado, sólo que en esta ocasión fue la excepción. Amazon decidió despedir a su Inteligencia Artificial (ojalá le haya tocado una buena liquidación).  La automatización ha sido pieza clave para el dominio del comercio electrónico que tiene la compañía.  En 2015, Amazon se dio cuenta de que su sistema no estaba calificando a los candidatos para los trabajos de software u otros puestos más técnicos.  ¿A qué se debe esto?

La Inteligencia Artificial fue educada durante una década con CVs de candidatos que, en su mayoría, eran hombres. Claramente, tenía un dominio masculino.  Automáticamente se descartaban a las mujeres independientemente de la información que poseían los currículums. La herramienta tiene que programarse para ofrecer igualdad de oportunidades sin importar el género.  --

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